Abre tus manos cadenciosamente, muévelas lentamente, camina con tus dedos, acaricia al aire y dale la vuelta a tus palmas....aprieta levemente ese momento, casi sin rozar lo intangible... una fuerza interior, un poder mágico cosquilleara alrededor de los pequeños montes que tus venas, que tu dermis hormiguean...que tus uñas rasgan. Eres tú. Sólo tú. Nadie más conoce tu forma de sentirte, ni siquiera aquell@s que toda una vida supieron creer oler tu presencia.Cita:
Iniciado por Perla
Perla, quizás no sea el día idóneo, quizás el vigor, el entusiasmo, la entereza y las fuerzas se arrinconen en la pequeña distancia que el párpado deja libre a a la dulcesal que resbala hacía el santuario de tus labios....
...aquellas manos, aquellas hormigas son sangre queratinada, licuada en la bondad de sentirse viva, y aunque duela. Aunque te duela, Perla.....te recome la esperanza de que se evaporen. No les dejes que hagan eso. No, por favor.....las lágrimas, son como las cicatrices, se esfuman, pero no se esconden a los recuerdos.
Ni lo bueno, ni lo malo es eterno. Así, es....así nos turba. Y ese efímero mañana no deja de ser una excusa porque ahora, en este preciso momento lo único que debe enorgullecerte, crecerte, resarcirse....son los sueños y sus telerañas.
Que la realidad es una esponja que se empapa de porvenir e ilusiones.
Apriétala delicadamente, estruje hasta la última gota de esa agua que nace de tu corazón sin estrategia, sin destino, ni propóstio....permite que tus mejillas, tu mentón, tu plexo se contraigan....se turben....te crezcan.
Sublime, sensación....la más pura y redentora.
La que se nos otorga hasta la próxima gota de aire.