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Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Dejad que os cuente un cuento. Es extenso, paciencia, pero os gustará, perdonadme la vanidad, lo digo solo por ella. Y por los compañeros que nos acompañaron.
Erase una vez una chica valiente. Porque aunque algo sabía de mí, era poca cosa. A no ser que, por esos círculos foreros de codillos y codazos recibiera información adicional a la que yo le había suministrado. Pudiera ser. Pero por una casualidad quedamos a comer. Y la verdad es que tenía ilusión por estar con ella. Conocerla. Comer y pasar un rato agradable, intentar hablar poco (cosa imposible en mi caso) y escuchar mucho. No perder detalle. ¿Lo he dicho ya?, conocerla.
No os la voy a describir, pues todos sabéis de ella. Corre por aquí con su estilo habitual, muy propio, brincando de hilo en hilo, apuntando ideas, señalando comentarios. Por el juego, sólo por el juego, me permite dar esta pista. No nos descubras Gerundio, pocos guiños y que sean inteligentes. ¿Inteligentes? Esta chica no sabe con quién está hablando, porque soy el único ser del planeta que no estoy contento con la inteligencia que repartió Dios, que todos opináis tener la suficiente pero yo no y, por eso, protesto, acción que también hago con las letras.
Me pidió mi descripción, la real. Y sencillamente le dije que es la que describo en el foro. No te preocupes le señalé, sabrás que soy yo, sin ninguna duda. El primer tipo bajito y feo que veas rebuznar, ese soy yo. Además, pocos viejos verás con pantalones verdes, camisa roja, pañuelo amarillo al cuello, trompeta, escalera, acompañado de una cabra. Estaba horrorizada, pero la calmé señalándole que, como invitaba, algunos dineros tenía que recaudar para el estipendio. Tú me puedes acompañar de palmera, que siempre da un aire a grupo folklórico y serio.
Cuando llegué no me reconoció. O es daltónica o estaba disimulando, creo que más lo segundo que lo primero. Ya se lo advertí, yo soy así, por mucho que parezca que estoy mintiendo: bajo, gordo, feo, desastrado, calvo y con una cara de idiota que acredita lo que soy.
Os la describo con dos palabras: guapa y coqueta. Algo pijilla, pero me gustan así. Puede ser mi hija si hubiera tenido una hace pocos años, pero como dejé de reproducirme allá por 1930, diría que más bien mi bisnieta. Y es que mis 86 años, pesan.
Escogió ella el menú. Un poco por comodidad y otro poco por ver que elegía. Sólo le hice una advertencia, aquello de que no lo tomara de mala educación, que pidiera lo que le gustara, pero que tuviera en cuenta que la pobre cabra carga con toda la cuenta y, a más cuenta más brincos en la escalera. Y ella, de palmera.
La verdad es que estuve bien cómodo. En el restaurante, un sitio agradable, saben cómo tratar a los animales. Me refiero, evidentemente, a la cabra, a quien dieron también de comer, por primera vez en su vida, una ensalada francesa. Y los comensales, ella y yo, degustamos platos y conversación. ¿De qué hablamos? Pues principalmente de ti, si, de ti, no te extrañe, te pusimos a parir, es que no te aguantamos. Y de ti, también ¿o creías que ibas a librarte? En fin, que os repasamos a todos y a todas, lo que siempre pasa en este tipo de encuentros en los que quien falta es objeto de piadosa chanza.
¿Os creéis que perdimos el tiempo así? ¿Si? Pues vaya pardillos estáis hechos.
Dinos, Gerundio, ¿no te entraron ganas de intimar, coquetear, provocar, conquistar, adular, seducir, mostrar tus encantos?
Por supuesto, no obstante mi edad, idiotez y fealdad soy un tipo muy coqueto y yo fui a eso. Y le mostré el mayor de los encantos que llevaba puesto, unas plantillas para las alpargatas, de diseño, para que al andar mis pies torcidos parezcan rectos. Me costó encontrarlas en una tienda de chinos, ya sabéis, todo a cien. Usadas, sudadas y escupidas por Mao en su Larga Marcha, eso me dijeron. A toda prueba.
Os reconozco que el momento álgido, aquel en el que sabes que todo puede ser posible, se rezuma erotismo y sexo - ¡bien, prospera el encuentro! - llegó con el pescado que ella solicitó para mí. Lo pidió crudo. Y en el momento de ensartarlo, ¡como se movía, atacaba y defendía el maldito!, utilicé el cuchillo de pescado como si fuera un escarpelo, y en rápidos movimientos lo maté, abrí, limpié y troceé. No sin los daños que al final cuento.
Ella, que no paraba de mirarme, supongo que no creía que pudiera existir un primate así, posó su mano sobre una de las mías, ¡oh, que suave roce delicado!, y mirándome tiernamente a los ojos me dijo:
- Estoy sorprendida, manejas como un bisturí el cuchillo de pescado. Con esas manos peludas tiernamente amorcilladas y esas feromonas masculinas de hombre primitivo que desprendes, ¿eres en todo así usando tus armas?
Sentí ardor al oírla, me estaba provocando, una explosión de hormonas me vencía, imaginaros, mas hormonas que el trozo de pollo de supuesta granja y grano que ella comía. Y le contesté con pasión:
- Yo manejo así el cuchillo de pescado, mi sable de corsario, la espada toledana acompañada de dos granadas que porto tapada bajo el cinto y, si me dejas y te entregas, te haré sentir el fragor y la descarga de los 120 cañones que tengo situados a estribor, marcando el ritmo los otros 120 de la banda de babor, con varias salvas en tu honor.
- Gerundio, no sabía que eras corsario – Y con mirada pícara, melosa, con un gracioso gesto de encanto, preguntó: ¿Si no consiguieras seducir y conquistarme, corsario con bergantín y cabra, me raptarías?
- Yo, por ti, bellezón, gastaría mis enormes tesoros acumulados por impago de mis deudas, te raptaría y abonaría el rescate en mi cuenta, me hipotecaría de forma directa, reversa e inversa, te aseguraría con derivados, firmaría y avalaría letras de cambio sin problemas, pólizas de crédito y préstamo, tiraría de tarjeta de crédito, inventaría nuevos timos, te acompañaría por el Caribe, y te confinaría en mi isla secreta, por nombre Antigua en honor a mi aspecto, lejos de todos, solo para mí. Solo mía.
Sonrió. Y en ese momento, hizo la pregunta que lo rompió todo, que me hizo volver a la realidad, tan cruda como el pescado del plato, al señalar: “Gerundio, mi pirata, soy una chica tímida, no me veo alternando con una cabra, los tangos se bailan a dos. Debes escoger entre ella o yo”. Ya sabéis, las mujeres, siempre, planteando la exclusión.
Intenté arreglarlo, le expliqué que la cabra la había adquirido en una subasta de la Legión, que cuenta chistes de Franco, que lía unos porros con grifa de encanto y que, entre sus muchas habilidades, desmonta en 5 segundos un mortero con los ojos cerrados y, al terminar, suelta un delicado “me cago en la Legión, Patria, Rey y Dios”. Pero ni por esas, no dio su brazo a torcer. Ahí vi el carácter de la doncella y sus claras ideas.
Tomé el postre con cierta tristeza. Ella esperaba una respuesta. No se la di y comprendió que mis pasiones, mis más bajas pasiones, siempre tienen que ver con los animales, una verdadera pena. Yo soy así, ecólogo-animalista de izquierdas y socio numerario de Adena.
Y nos despedimos con rapidez. Ambos nos miramos llorosos. Le di la mano, un beso, y mirándola a los ojos, le dije: “Eres la primera mujer en mi vida que ha sembrado una duda, por una vez a punto he estado de abandonar la cabra que tantos beneficios y placeres me ha reportado”. Mujer inteligente, comprendió que ella, subida a la escalera, estaría ridícula mientras yo toco la trompeta. A cuatro patas nada digo, eso sería una grosería, entre nosotros muy deliciosa. He perdido un amor que hubiera vivido con pasión caribeña, ella, la cabra y yo, que soy de gustos refinados. Incluso un cuarteto, pues no os he hablado, ni a vosotros ni a ella, de mi loro, Macarena, que me anima los saraos en el camarote de mi galera.
He de reconocer que para acudir a esta comida tuve que argumentar unas cuantas excusas. Cosas de donde trabajo, mis acreedores, los compromisos y la agenda. Y como lo pasé muy bien, espero que ella también, todos los comensales, y fui muy inocente y coqueto pues intenté que me viera diferente, jovencito en lo posible, colocándome los despojos, cremas, afeites y el disfraz de los domingos - una ocasión así lo merecía - he de deciros como resumen, yo, que soy un autentico e incorregible gamberro, que hacía mucho tiempo que no realizaba - ¿cómo os lo diría? – pienso, medito, sí, eso, eso, nunca mejor puesto, una travesura tan bella como agradable. Fue, para mí, un autentico lujo. Aunque la cabra se queje hoy, danzando en las alturas, por su natural agotamiento.
Y si un día, mis verdes compañeros, paseando por Barcelona, veis a un tipo con cara de idiota, raro, bajo, feo, gordo y calvo, tocando la trompeta mientras una cabra baila en su escalera, no os sorprendáis, soy yo que sigo acumulando propinas para pagar la cuenta. La hermosa niña se pasó pidiendo un vino pijo, por el precio solicitado me explicaron que lo había pisado y macerado el mismísimo dios Baco, y que no se guarda en bodega sino en la caja fuerte de un Banco.
Releo y corrijo. Veo que no hay ninguna pista sobre ella o ellos, he sido discreto, cumplido y eso ya es mucho para un idiota. Adelante, habiendo guardado celosamente su identidad, lo publico.
Esto es exclusivamente para ti, bellezón, y los que acompañaron, aunque lo lean otros, con todo el aprecio de este viejo idiota y pretencioso, excusándome en mi habitual torpeza. Gracias por tu compañía, tu simpatía y belleza, soportar mi verborrea sin mostrar esfuerzo y el excelente tiempo pasado. El mejor recuerdo además de los expuestos, mi luxación perpetua en la mano derecha y pérdida de tres dedos tras la batalla campal con el pescado. Nunca más pidas para mí, como manjar, un vivo tiburón blanco. Que para este tipo de plato, lo digo por aprecio a mi vida y personal defensa, mejor de cubierto un arpón cañonero que el cuchillo de pescado. La próxima vez, potaje de lentejas y tinto Don Simón. Me lo ha sugerido la cabra, exhausta y a punto de morir bailando que, por primera vez en nuestro tórrido romance, me ha tildado de cabrón. ¡Lo que hace decir el amor!
Y un especial y alegre recuerdo a dos foreros, pululan por aquí, dando la vara. Todos vieron que lo que cuento es verdad, nada más lejos de la realidad, pues nos acompañaron. Eso sí, no me hizo nada de gracia el comentario relativo a que lo mío no lo arregla ni el mejor cirujano, solo es posible con un baño integral en la fuente de Lurdes o en el Vaticano, el puro milagro. ¡Yo no soy tan feo y horroroso, digamos que me aparto del canon de belleza habitual! ¿O no os disteis cuenta de mi precioso blanco de ojo? Del izquierdo, naturalmente, que el derecho ya notasteis que es de vidrio. Y, en cuanto a las luces, ya veis, peor instalación que la de mi pueblo, que no hablan de bombillas y farolas sino de candelas. Ya os lo había advertido.
¡Que lo sepáis, disfruté un montón! Gracias por todo.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
y yo pensando que esto terminaba en trio.... cabra + ??????????????????? + Gerundio
)8)8) )8)8)
en cuanto a recaudar fondos, si te interesa sindicarte....
yo dispongo de una "plaza" en muy buena esquina y mi acordeon....
soy capaz de tocarte los pajaritos, (los huevos tambien, jejeje :mrgreen: :mrgreen: )
BRAVO !!!!! :1st:
congratulations para los comensales.
Vivan las conspiraciones :yahoo:
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Amigo Gerundio, permíteme que te llame amigo, de tanto leer a Mr. Watson algo se me está contagiando. ¿Como se te ocurre darnos tal ladrillazo? Has sido el causante de un colapso en el foro y ya ves, un montón de horas sin poder entrar. Y todo por culpa de tu ladrillazo.
Y encima debo ser masoquista porque lo he leído de cabo a rabo. Te haría muchos comentarios, tal vez me saldría otro tocho. Y la verdad, tampoco quisiera distraer la atención del personal ya que necesito que me den consejo y con suerte, alguien que sepa contener las carcajadas me ayude a resolver ese pequeño problema que ayer, tras mucho meditar, tuve el valor de plantear en este foro.
Permite que no me extienda demasiado en mis comentarios, pero ¡que suerte que tienes!, no sabes como te envidio. Pocas cosas en este mundo deben dar tanto placer como la gran fortuna de tener una cabra. ¿ Dices que la compraste en una subasta a la legión?, ¿no se llamará Manuelaaaa...? Si es ella dile que la quiero, que la fui a buscar en 1935, que no la encontré porque parece ser que en aquellos tiempos la legión estaba algo revuelta. Dile que la quiero, que todos estos años he pensado en ella. Que removí cielo y tierra para encontrarla y que en 1972 desistí en mi empeño. Manuela es el amor de mi vida, y no he sido capaz de rehacer mi vida desde que aquel día que me licenciaron y el Sargento Rupérez frustró nuestra fuga. Así me ha ido, ninguna mujer, digo NINGUNA, ha sido capaz de serenar mi desasosiego, tras cinco parejas estables y docenas de fugaces, siempre la imagen de esa cabra, mi amada cabra, volvía a mi mente. ¡Que momentos! ¡Que deliciosos e inolvidables momentos!.
Si responde al nombre de Manuela, dile que la quiero y que mi corazón siempre ha sido suyo. Y pregúntale si se acuerda de Cipo, de su Cipo, en aquellos tiempos joven, sin pelos en las orejas y que utilizaba alzas para seguir siendo legionario y compartir bellos momentos con ella.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Gerundio........
Te gusto?
;) ;) 8) 8)
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
¡Dioses, cuanto honor, Travesura Bella, Bella Travesura, me pregunta una cuestión!
Preguntar algo de lo que solo crees una respuesta es peligroso, muy peligroso, porque si es la esperada puedes poner en un compromiso a quien te contesta y, si te equivocas, quedarás en ridículo.
Pero no es el caso. ¡Claro que me gustas! Me gustas mucho, lo sabes, Travesura Bella, Bella Travesura.
Te sabrá a poco el gusto que te cito, pero te aseguro que es intemporal, finalizará cuando tú me lo prohíbas.
Y como se que dudas de ello, te lo acredito, aquí, ya, ahora mismo, de inmediato, en el foro, que no se diga que tengo miedo. ¡Luces y taquígrafos!
Me gustas desde el primer día, y de eso hace ya más de dos años. Y como sucede con quien me gusta, lo primero que hice fue saber tú nombre. Y me puse a pensar si era adecuado. Alguna vez te lo he dicho, todavía no sé cuál es el más indicado, si Travesura Bella o Bella Travesura. Sigo con la duda. ¡Y llevo en ello varios años! Por eso y hasta que me decida, siempre te cito así, Travesura Bella, Bella Travesura.
Pero una vez resuelva la duda, seguiré con tus manos y brazos. Si con el nombre llevo años, aquí estaré décadas.
Y, nuevamente, a continuación, seguiré con tus ojos, frente, cabello, cejas, orejas, nariz, labios, el conjunto de tu rostro. Tú forma de mirar y sonreír. Esos gestos coquetos. Tu voz. Y aquí, ya lo supones, estaré siglos mirando y escuchando.
Y seguiré, no lo dudes, porque observaré tu cuello, hombros, pecho, vientre y piernas. No te puedo cuantificar el tiempo, Travesura Bella, Bella Travesura, porque aquí, estoy seguro de ello, será eterno.
Y una vez transcurra esa eternidad, que hasta lo eterno se consume, llegaré al resto de tu cuerpo y de ahí, si puedo, a tu alma. Largo recorrido para alcanzar lo que me interesa. No te diré más, durará lo que dure el infinito.
Esto último, Travesura Bella, Bella Travesura, lo he puesto por rimar, porque por aquí hay damas que bien saben que, si se trata de Gerundio, el record está establecido en siete segundos. Pero no quedaba bien tan mínimo tiempo y he decidido forzar el argumento.
Aunque………… quien sabe ¿verdad? Las escasas y mínimas diferencias que hay en cómo me presento en el foro a como soy en realidad, pueden hacerte sospechar que lo mismo existen cuando digo como actúo y la realidad. Mínimas diferencias. Quizás. Sólo el saber que lo puedes pensar, es lo que hace que me guste el que me gustes, una redundancia querida que en este caso no hay que perdonar.
Espero haber contestado tú pregunta, Travesura Bella, Bella Travesura. Un beso.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Pero Gerundio...... 87 años y todo eso?¿?
Uy no sé------ no lo veo claro.... :twisted: :twisted: :twisted:
Por cierto, sí disimulaba, pero vamos a ver, es normal, no?¿ estamos en invierno y se te ocurre aparecer con esa camisa de flores de Hawai?¿? Encima la explicación de que los otros dos te sugieron eso porque seguro que me iba a gustar, pues no vale........
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Gerundio ahora el sombrero me lo quito yo!
Sencillamente genial!!!! :good:
Un abrazo!
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Gerundio, cuando vayas de bolos con la cabra, la palmera y tu...si necesitais un servicio esmerado de catering, no dudes en comunicarmelo. :D :D
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Gerundio...
Has acabado conmigo. No escribiré más... nunca llegaré a tu altura. No practicaré los rituales de seducción... sería imposible emularte, siquiera con pantalones verdes.
Es el fin. Volveré a los bolillos y las laborers de aguja, de donde nunca debería haber salido.
Ha sido un golpe bajo, Gerundio.
Y además, estás conquistando a Trave.
Y no tengo Golden M. Al parecer alguien de altos vuelos ha acaparado todas las existencias en los mercados internacionales
Adios, no tengo palabras. Que final más triste. Que corto ha sido. Siquiera me ha dado tiempo a probar el Joselito.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Lo siento...
Mira que suelo leerme casi todos los post que se van poniendo por el foro (aunque no conteste con la asiduidad con que lo hacen otros colegas)...
¡¡pero este me niego!!
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
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Originally Posted by cipoton
Permite que no me extienda demasiado en mis comentarios, pero ¡que suerte que tienes!, no sabes como te envidio. Pocas cosas en este mundo deben dar tanto placer como la gran fortuna de tener una cabra. ¿ Dices que la compraste en una subasta a la legión?, ¿no se llamará Manuelaaaa...? Si es ella dile que la quiero, que la fui a buscar en 1935, que no la encontré porque parece ser que en aquellos tiempos la legión estaba algo revuelta. Dile que la quiero, que todos estos años he pensado en ella. Que removí cielo y tierra para encontrarla y que en 1972 desistí en mi empeño. Manuela es el amor de mi vida, y no he sido capaz de rehacer mi vida desde que aquel día que me licenciaron y el Sargento Rupérez frustró nuestra fuga. Así me ha ido, ninguna mujer, digo NINGUNA, ha sido capaz de serenar mi desasosiego, tras cinco parejas estables y docenas de fugaces, siempre la imagen de esa cabra, mi amada cabra, volvía a mi mente. ¡Que momentos! ¡Que deliciosos e inolvidables momentos!.
Si responde al nombre de Manuela, dile que la quiero y que mi corazón siempre ha sido suyo. Y pregúntale si se acuerda de Cipo, de su Cipo, en aquellos tiempos joven, sin pelos en las orejas y que utilizaba alzas para seguir siendo legionario y compartir bellos momentos con ella.
Gerundio, tu silencio levanta mis sospechas. Empiezo a pensar que la cabra es Manuela y que optas por callar para evitarte el riesgo de que siga enamorada de mí y la pierdas.
Tranquilo, que sabiendo que andas por ahí con ella... os encontraré y que sea ella quien decida con quien se queda.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Cipotón, la cabra se llama Loli. Si, Loli. En recuerdo de una amiga que me fastidió de jovencito. Fue la primera, luego hubo 17.547 más, que me dijo no a follar.
En la subasta había una Manuela. Y por las fechas que detallas ahora se el porque tenía mala pinta. Pero no pujé por ella porque todos los legionarios de la sala la llamaban Manola, se relamían y por ella pedían barbaridades. Vete a saber tú que especialidad tenía. La mía baila en la escalera.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
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Originally Posted by osito58
Gerundio, cuando vayas de bolos con la cabra, la palmera y tu...si necesitais un servicio esmerado de catering, no dudes en comunicarmelo. :D :D
No tengo ningún tipo de duda, Osito. Ninguna.
Y gracias.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Veamos, dejaos de tonterías y de chorradas e id al grano. Dices, Gerundio, que nos repasasteis a todos? Pues ya puedes ir desgranando la información, que es lo único que nos interesa. Sólo te pìdo un favor: si la cabra era la doctora gess te ruego que no me cuentes lo que te dijo...
¿Qué coño dijisteis de mi?
Capi
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Realmente... un gusto haber leido este relato tan... no se como decirlo..... me invitarias a cenar??? jajajaja ..... o simplemente tengo que comenzar a prestar mas atencion cada vez que vea una escalera.. y buscar a este personaje tan.. como decirlo..... tan peluculiar, con su cabra??? jajaja
simplemente..... aplausos y mas aplausos...
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
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Originally Posted by victoria.sexy
Realmente... un gusto haber leido este relato tan... no se como decirlo..... me invitarias a cenar??? jajajaja ..... o simplemente tengo que comenzar a prestar mas atencion cada vez que vea una escalera.. y buscar a este personaje tan.. como decirlo..... tan peluculiar, con su cabra??? jajaja
simplemente..... aplausos y mas aplausos...
YO si que te invito a cenar,,, :mrgreen: :mrgreen: tu escoge el sitio "") y si nos da tiempo tambien ponemos a parir a todos, jejeje
Capi tranquilo que de ti hablaremos bien :beer:
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Estimado Gerundio, como compañero de habitación en el Asilo me veo obligado a poner en tu conocimiento que alguien, estoy intentando averiguar quien, te pilló e hizo algunas fotos tuyas con la cabra en una incompostura.
Concretamente, una de esas fotos abre múltiples dudas sobre si la cabra es cabra o por el contrario es cabrón. Lo que no hay ninguna duda, por la cara de cariño que muestra, que está perdidamente enamorada/o de ti y que entre vosotros existe una relación pasional que se hace muy evidente, sobre todo, en una de las fotos en la que tú debías estar reuniendo las monedas que te habían tirado a cuatro patas y Loli aparece apoyando sus patas delanteras en tus hombros con mirada lasciva. Francamente, una vez miras la foto con detenimiento, los 142,6 cm. De miembro viril que se manifiesta entre las patas traseras de ella, da mucho que pensar. Tampoco tu pose y la actitud de entusiasmo ante la misma de la cabra, ayuda a deducir de ellas otra cosa que esos rumores que alguien, no digo quien pero... Nietze ¿has de explicarnos algo?, está haciendo circular vía privados, msn y otros medios entre los pesos pesados de este foro (yo con mis 147,6 Kgs, soy uno de ellos).
Por nuestra afición compartida y nuestra debilidad ante los exóticos encantos de la raza capruna, pongo en tu conocimiento esta campaña que alguno, o algunos han arrancado alevosamente y que ya empieza a dar sus frutos. Yo ya he sido víctima de la misma y al leer que Manola aún estaba en la Legión corrí raudo y veloz en su busca y llegué tarde. Por lo que me explicaron, dos horas antes se personó en Capitanía un señor de unos treinta y cinco años, alto, rubio, con ojos azules; acompañado por una dama rubia, presuntamente top model de lencería y con un gran coche negro y un chófer de más de dos metros de altura. Llevaba cartas de recomendación del Obispo Auxiliar de Alcalá de Henares y del Capitán General de la IV Región.
Ante tales recomendaciones, el furrier no tuvo más opción que venderles mi Manola por 26 Euros. Pero aquí no acaba la historia. Tenían mucho interés por otra a la que llaman Loli, no sé si será la tuya y recibieron toda la información sobre su paradero. Yo, en tu lugar, extremaría las precauciones y estaría muy pendiente de que nadie te siga.
Seguiré informando, que ahora voy en busca de mi Manola. El “puertas” de Capitanía me informó, previo pago del correspondiente soborno (17 cts. que era todo lo que llevaba encima), que tras lavarla y desinfectarla la habían entregado en la suite 310 del Hotel Florida, después de hacer una parada en una Farmacia para comprar un tubo de Vaginesil, siguiendo las estrictas instrucciones de los compradores.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
La cabra, el cabrón y el Cipotón. :mrgreen:
Anda, que no os lo pasais bien en el asilo. De mayor quiero se como vosotros....aunque me faltan todavia algunos lustros. :D
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Totalmente cierto lo que dice Cipotón. A mí me ha llegado además la prueba de que se trata sin lugar a dudas de una cabra infiel, como se puede comprobar más abajo
http://img152.imageshack.us/img152/1...my49knnls2.jpg
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Antes de contestarte, Cipotón, debo mostrar mi desagrado por la intervención de Osito, pues no deja lugar a dudas al despejar cual es mi papel. Y me muestro ofendido, le pediría la próxima vez que el acertijo sea más complejo, que vistas las luces del personal, no lo llegarán a resolver. Va el tipo y dice: •”La cabra, el cabrón y el Cipotón”.
Si la cabra es conocida, el citado Cipotón también, ¿Quién se adjudica el papel de cabrón? ¿Será acaso un servidor? Eso es despecho, y todo porque un día, a Travesura Bella, Bella Travesura, le gustó mucho más mis tonterías acreditativas del gusto que siento por ella, que el ragú de pollo hormonado que él le preparó. Y es que ya lo dicen por ahí, Osito lo ignora, conquistar a una dama por su estómago es no tener ni idea de anatomía. Osito, como todo buen cocinero, es egoísta, y solo conoce la anatosuya.
Y si, Cipotón, si, ha llegado a mis oídos, vía mail privado, un vil chantaje mediante unas fotografías en las que ciertamente, he de reconocerlo, aparece un viril miembro de 146 cm. Fíjate quien es el taimado, Nietze, que hace público el delito y mi vil posición.
Pero no es lo que tú piensas. Bueno, si, si es lo que tú piensas, pero las intenciones eran otras.
Y es que, tras leeros por aquí y ver que a más de uno le iba el que su chica le perforara ese ojo ciego que da tanto supuesto gusto, me pregunté si podía probar con Loli, desconociendo que mi amada tiene por gusto comprarlo todo en chinos, ya sabes, los productos de a cien.
Ya me lo advirtió, “Gerundio, que en los chinos, por unas monedas, te dan mucho producto.” Pero yo pensé que la cosa no sería seria, hasta que noté que no podía articular palabra, un pólipo de látex, entrado por el culo, me bloqueaba las cuerdas bucales. Inoperable.
¡Como te lo cuento!
Y es que, algunas veces, he de reconocerlo, no peco de bestialismo por mis amores con una cabra, que nuestros compadres no lo entienden, pero tú sí que sabes que es guapa, sino por ciertas aberraciones a las que me someto, por mantener el amor de mi amada.
Con facilidad olvido que la compré en una subasta de la legión, ya sabes, un grupo de machotes que en pleno invierno desfilan, arremangados y con el pecho al aire, ante el Rey. Y la cabra, ya la ves, cojeando la pobrecilla tras tórridas noches junto con tan distinguida compañía. Por lo que no es extraño que piense, al agacharme, que yo soy del mismo tercio, me refiero, naturalmente, al de la Legión.
Ten mucho cuidado con Manola, que si es de ese tercio lo mismo te exige un francés. Esperemos que no sea completo. Aunque dicen los dietistas que el requesón siempre es bueno. Eso ya lo veré, la próxima vez, cuando advierta tu aspecto. Mejorado, sin duda, dada la rica proteína.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
En honor a la cabra Manola y a ti mismo Gerundio, me he inspirado para crear un nuevo plato que mañana, Dios mediante, pondré en la carta del restaurante : pata de cabra Manola, deshuesada y rellena de ciruelos con salsa agridulce de higos. Cuando actuéis en la plaza del pueblo, con la cabra sustituta y esa escalera que robaste en el Leroy Merlin, te emplazo a que vengáis a catarla y deis el visto bueno para tan excelsa creación. Como dice el Adriá, crear es no copiar, así que como Manola solo existe una en el mundo, es algo único e irrepetible. Cada bicho, es cada bicho.
Os espero.[youtube:2fxhz73n]qiNh4VWKN1g[/youtube:2fxhz73n]
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Osito... me has dejado ahoa ahoa ahoa
Eso no se hace a un amigo. Acaso no has leído que Manola es para mí algo muy especial. ¿Acaso aceptarías que me comiera yo a tu amada con relleno de piñones y ciruelas?.
Me has sorprendido, me has decepcionado.... Si aún está "entera" te la compro. Pago bien.
Como no la hayas tratado con el cariño que mi Manola se merece, pasarán cosas... no digo que, pero algo pasará.
Voy p'allá a ver si llego a tiempo de salvar a mi Manola. E iré sin poner el GPS, así que llego seguro.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Osito, no hay derecho. Por un lado me llamas cabrón y ahora, te felicito por la búsqueda, me expones a mí y a la cabra a la vista de todos. El de la vara soy yo.
Es un honor, en serio, la idea del plato. Y si tienes dificultades en encontrar ciruelos yo sé ………… mejor no digo nada …………………… que ese ciruelo anda muuuuuuuuuuu pero que muuuuuuuuuuuuuu escocido clamando venganza. Un saludo, compañero.
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Re: Ladrillazo: La comida, la compañía y la cabra
Gerundio, donde has dejado a la palmera, que no la encuentro en el video. Tambien tengo planes para ella. :mrgreen: :mrgreen:
No os preocupeis por Manola, no sufrirá lo mas minimo.