Durante un momento del 1 de agosto de 2008, el cielo diurno se volvió negro a lo largo del camino del eclipse total solar .
Mientras se observaba el geocéntrico evento celestial desde Mongolia, el fotógrafo Miloslav Druckmuller realizó múltiples tomas con dos cámaras separadas mientras que la Luna bloqueaba el brillante disco solar y oscurecía el cielo.
Esta composición final consiste en 55 tomas con un rango de exposición entre 1/125 y 8 segundos.
Sólo abarca 12 grados, con una posición relativa de la Luna y el Sol que corresponde a mitad del eclipse.
A la izquierda está el brillante planeta Mercurio , pero también se pueden ver muchas estrellas, incluyendo el cúmulo de estrellas del Pesebre (también conocido como M44 o Colmena ) en Cáncer, encima a la derecha de la silueteada Luna.
Extraordinariamente, las condiciones casi perfectas y las exposiciones individuales permitieron a la composición registrar la superficie lunar y a su vez la delicada corona solar hasta una distancia de casi 20 veces el radio del Sol.
De hecho, la composición presenta un rango de brillos más allá de lo que cualquier ojo pudiera ver durante un eclipse.