Rigel y la Nebulosa Cabeza de Bruja.
Doble, doble labor y problemas; Arda el fuego y la caldera hierva. Quizás Macbeth debería haber consultado a la Nebulosa de la Cabeza de Bruja.
Esta nebulosa de reflexión de sugerente forma en la parte inferior izquierda está asociada con la brillante estrella Rigel, a su derecha, en la constelación de Orion.
Más formalmente conocida como IC 2118, la Nebulosa Cabeza de Bruja brilla principalmente por la luz reflejada de Rigel. El fino polvo en la nebulosa refleja la luz.
Presentada aquí, el color azul de la Nebulosa Cabeza de Bruja y del polvo que rodea Rigel se debe no solo al color azul de Rigel, sino tambien a que las partículas de polvo reflejan la luz azul de manera más efectiva que la roja.
El mismo proceso físico hace que el cielo diurno de la Tierra se vea azul, aunque los dispersadores de la atmósfera terrestre son moléculas de nitrógeno y oxígeno.
Rigel, la Nebulosa Cabeza de Bruja y el gas y polvo que las rodean se encuentran a unos 800 años luz de nosotros.
M101 del Spitzer.
La galaxia espiral M101, grande y hermosa, es una de las últimas entradas en el famoso catálogo de Charles Messier, pero con certeza no una de las menos importantes.
Con unos 170.000 años luz de diámetro, esta galaxia es enorme, casi dos veces del tamaño de nuestra propia Galaxia, la Vía Láctea.
M101 fue también una de las nebulosas espirales observadas por el gran telescopio de Lord Rosse en el siglo XIX, el Leviatán de Parsontown.
Capturada en longitudes de onda infrarrojas por el telescopio Espacial Spitzer, esta imagen del siglo XXI muestra la luz de las estrellas en tonos azules, mientras que las nubes de polvo de la galaxia están en rojo.
Examinando las características del polvo en el borde externo de la galaxia, los astrónomos han encontrado que faltan las moléculas orgánicas presentes en todo el resto de M101.
Las moléculas orgánicas rastreadas por los instrumentos del Spitzer son denominadas hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAPs).
Naturalmente, los HAPs son componentes comunes del polvo en la Vía Láctea y en el planeta Tierra se encuentran en el hollín.
Probablemente los HAPs son destruidos cerca de las fronteras exteriores de M101 por la potente radiación de las intensas regiones de formación estelar.
También conocida como la Galaxia del Molinete, M101 se encuentra en los límites de la constelación septentrional de la Osa Mayor, a unos 25 millones de años luz de distancia.
El polvo y la Galaxia Hélice.
El polvo hace que este ojo cósmico parezca rojo.
La inquietante imagen del Telescopio Espacial Spitzer muestra radiación infrarroja desde la bien estudiada Nebulosa Hélice (NGC 7293), a sólo 700 años luz de distancia en la constelación Aquarius.
El sudario de polvo y gas de dos años luz de diámetro alrededor de una enana blanca central ha sido considerada por mucho tiempo un ejemplo excelente de una nebulosa planetaria, que representa las fases finales de la evolución de una estrella similar al Sol.
Pero los datos del Spitzer muestran que la propia estrella central de la nebulosa está inmersa en un sorprendente resplandor infrarrojo brillante.
Los modelos apuntan a que el brillo está producido por un disco de restos de polvo.
Incluso aunque el material nebular fuera expulsado desde la estrella hace muchos miles de años, el polvo próximo podría ser generado por colisiones en una reserva de objetos análogos al Cinturón de Kuiper de nuestro propio Sistema Solar o la nube cometaria de Oort .
Formados en lejanos sistemas planetarios, los cuerpos semejantes a cometas podrían haber sobrevivido incluso en las dramáticas etapas finales de la evolución estelar.
No es una Luna Azul.
Esta brillante Luna Llena fue captada el 2 de diciembre, brillando sobre una iglesia con vistas al río Po, en Turín (Italia). Era la primera Luna Llena de diciembre.
Brillando en las celebraciones del día de Fin de Año, la Luna Llena de la pasada noche fue la segunda Luna Llena de diciembre, por lo que encaja en la moderna definición de una Luna Azul, la segunda Luna Llena en un mes.
Debido a que el ciclo lunar, de Luna Llena a Luna Llena, abarca 29,5 días, la lunas azules suelen ocurrir algún mes cada 2,5 años.
Brillando en el resplandor, justo por encima y a la derecha de la primera Luna Llena de diciembre, está el cúmulo estelar de las Pléyades.
Eclipse de Luna Azul.
El Año Internacional de la Astronomía 2009 finalizó con una Luna Azul y un eclipse parcial lunar, mientras la segunda Luna llena de diciembre rozaba la sombra de la Tierra el 31 de diciembre.
El eclipse de la Luna Azul del día de Fin de Año fue visible a través de Europa, Asia, África y partes de Alaska, capturado en esta composición de dos exposiciones en los cielos nublados sobre Saint Bonnet de Mure (Francia).
Jugando a través de la Luna meridional, el borde de la umbra de la Tierra o la oscura sombra central, aparece en el lado derecho a lo largo del prominente rayo del cráter Tycho.
En el máximo del eclipse, la umbra cubrió solamente un 8 por ciento del diámetro del disco lunar.
Una fuerza del espacio vacío- El efecto Casimir.
Esta diminuta bola prueba que el universo se expandirá eternamente. De apenas una décima de milímetro, la bola se mueve hacia una tersa placa en respuesta a las fluctuaciones de energía en la vacuidad del espacio vacío.
Esta atracción se conoce como efecto Casimir, en honor a su descubridor, quien, hace 50 años, intentaba comprender por qué los fluidos como la mayonesa se mueven tan lentamente.
Hoy en día, las evidencias se acumulan respecto a que la mayor parte de la densidad de energía en el universo se encuentra en una forma desconocida apodada energía oscura.
La forma y origen de la energía oscura se desconoce casi por completo, pero se especula sobre su relación con las fluctuaciones de vacío de manera similar al efecto Casimir, pero generadas de algún modo por el espacio en si mismo.
Esta enorme y misteriosa energía oscura parece repeler gravitatoriamente a toda la materia. De ahí que posiblemente causará la expansión del universo por siempre.
Entender las fluctuaciones de vacío está en la primera línea de las investigaciones no solo para entender mejor nuestro universo sino también para evitar que las piezas de micromáquinas mecánicas se peguen entre si.
El Núcleo del Cometa Halley - Un Iceberg en órbita.
¿A qué se parece el núcleo de un cometa?
Formado de materia primordial del Sistema Solar, se pensaba que el núcleo cometario se parecía a icebergs muy sucios.
Pero los telescopios terrestres vislumbraron sólo nubes de polvo y gas envolviendo al cometa cerca del Sol, que sólo revelaban claramente la coma del cometa y las características colas cometarias.
Sin embargo, en 1986, la sonda europea Giotto se convirtió en una de los primeros grupos de sondas espaciales en encontrarse y fotografiar el núcleo de un cometa, pasando y grabando el núcleo del Halley conforme se iba aproximando al Sol.
Los datos de la cámara del Giotto se usaron para generar esta imagen resaltada de la forma de patata de su núcleo que medía apenas 15 kilómetros de diámetro.
Se pueden ver algunas características de superficie en el oscuro núcleo a la derecha, mientras que el gas y el polvo fluyen hacia la coma del Halley a la izquierda.
Cada 76 años el Cometa Halley regresa al sistema solar interior y cada vez el núcleo derrama una capa de unos 6 metros de profundidad de su hielo y roca al espacio.
Estos desechos expulsados por el núcleo del Halley se dispersan eventualmente en una órbita responsable de la lluvia de estrellas Oriónidas en octubre de cada año y las Eta Aquaridas cada mayo.