- Cariño, creo que estás obsesionado con el fútbol, y me haces falta.
- ¡¡Qué falta!! ¡¡Qué falta!! ¡Pero si no te he tocado!
- Cariño, creo que estás obsesionado con el fútbol, y me haces falta.
- ¡¡Qué falta!! ¡¡Qué falta!! ¡Pero si no te he tocado!
El amor crea tensiones, el sexo las relaja.