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Don Vito Corleone
Veo el vaso medio lleno
7 de marzo de 2011
Albert Lesán –Periodista–
Viendo como se están sucediendo los acontecimientos en Can Perico, tras la venta de dos de sus defensas titulares, y de analizar la pérdida de viscolástico del colchón que mantenía cómodamente al Espanyol en puestos europeos creo que es momento de ver el vaso medio lleno. Una de las partes positivas es que el resto de equipos también pierden pero principalmente creo que el aficionado del Espanyol va a respirar tranquilo, en breve, porque Osvaldo está ya a punto de caramelo. Osvaldo es sin duda uno de los mejores delanteros de este campeonato y para una plantilla justita como la blanquiazul recuperar a su mejor jugador es un golpe de efecto y de moral necesario para recuperar el aliento.
Creo mucho en las tendencias cuando estudio a equipos de fútbol. Está claro que la tendencia de estas últimas jornadas ha sido irregular, siendo muy generoso, y es por eso que hay que darle un volantazo y un empujón a la situación para recuperar la velocidad de crucero. La mayoría de equipos han fichado en invierno para pulir sus equipos, el Espanyol ha vendido. Creo que se equivocó Dani al vender de golpe a 2 de sus titulares cuando el equipo tenía serias opciones de colarse en puestos de Champions. Jugar la Champions da más dinero si se hace sólo regular, de lo que ha cobrado el Espanyol por esos traspasos. Es por eso que no entiendo lo que ha hecho esta directiva con la temporada tan fantástica que estaban realizando los blanquiazules.
Por suerte Osvaldo estaba lesionado en el mercado de invierno. Estoy seguro de que si Osvaldo no se hubiera lesionado ya no jugaría en el conjunto catalán. Lo digo porque medio planeta futbolístico le quería y visto lo visto, Dani no hubiera dudado ni en segundo en traspasar al delantero perico. Vuelvo a ver el vaso medio lleno: Aunque parezca un contrasentido Osvaldo estaba lesionado cuando se movió el mercado y ahora los aficionados de Cornellà-El Prat, van a tener a su máxima figura para disputar la fase decisiva del campeonato. Aunque suene raro: bendita lesión.