Antibarcelonistas
Hola, amigos.
El Espanyol volvió a demostrar en el derby que es un equipo pequeño que forma parte de un club pequeño. No encuentro otro razonamiento para explicar lo que vivimos el sábado. Llevo muchos años escuchando las quejas de los directivos, los socios, los aficionados, los jugadores y los técnicos pericos. Llevo muchos años escuchando los mismos lamentos: que si los medios de comunicación no les hacemos caso, que si están siendo discriminados, que si hay un trato de favor hacia el Barça, que si... Y la realidad es otra muy diferente: el Espanyol tiene lo que se merece porque ni genera audiencia ni es capaz de crear un proyecto deportivo propio que entusiasme y que aumente su popularidad en Catalunya. Su único objetivo, en los últimos años, ha sido intentar fastidiar al Barça. Y cuando lo han conseguido lo han celebrado como un título. Ridículo...
Da la sensación de que el antibarcelonismo se ha convertido en la principal seña de identidad del Espanyol. Los pericos han abandonado cualquier sueño europeo y no han sabido aprovechar la construcción de su nuevo campo en Cornellà-El Prat para iniciar una nueva aventura como club, creciendo entre las comarcas metropolitanas. No han conseguido crear un estilo propio, que debería estar basado en la cantera, ni han encontrado su camino como complemento del gran Barça. Al contrario. Han pretendido compararse con el club blaugrana y se han equivocado. Porque ellos, por historia, por sentimientos y por capacidad económica, jamás serán como el Barça. Como el Atlético jamás será como el el Real Madrid. Son incapaces de aceptarlo y, como alternativa, se dedican a sembrar odio contra todo lo que es blaugrana.
Los gritos de "¡***, Barça!" al final del derby son una demostración de ese sentimiento antibarcelonista que crece cada día más entre los pericos. Con un juego agresivo y con una demostración de antifútbol consiguieron arrebatarle dos puntos al equipo de Guardiola. Y con eso se sintieron felices. No miraron que su gran objetivo, la salvación, todavía no está conseguido. Sólo pensaron en que podían fastidiar al Barça y complicarles la Liga. Triste, muy triste. Pero parece que este es el camino que han elegido. Se equivocan...