Iniciado por
ganxo
Enanito gruñon, no se había recuperado de la visión de blancanieves y se fue al bosque mágico, cerca del arroyo a refrescar sus calenturas, cuando las visiones de la ninfa de los bosques le aturdieron tanto que casi muere.
Arrastrando el peso y una cierta vergüenza de una erección permanente acudió a una clínica altamente recomendada, aquejado de un priapismo alarmante. Sin embargo la visión de la doctora, le supuso una recaida más fuerte en su enfermedad. No podía pensar, no podría, dejar de desear, por no poder no podía ni caminar en aquél estado. Su compañero bonachón le recomendó ejercicio físico. Gruñoncito, decidido se apuntó a un gimnasio, pero ..... parecía que vivia en un matrix sexual sin retorno, dudaba ya de su cordura, fuera donde fuera siempre era la misma visión. su enfermedad pese a parecer imposible seguía en aumento y el acabó por convencerse que vivía una obsesión en que todo cuanto le rodeaba se acababa conviertiendo en la visión cada vez más tórrida y excitante de su dulce blancanieves.
Le aconsejaron ir a los baños y encontrar alivio en una inmersión de agua fria, y.... no!!! no podría ser cierto!!!!, otra vez aquella visión, rodeada de manzanas y rosas. Decididamente estaba enfermo. Finalmente acudió a la visita de un psicólogo. Necesitaba una solución, pastillas, infusiones, flagelaciones...., la temperatura de su cerebro y de sus genitales era superior a cualquier experiencia conocida y ya no podía poenrse ningún pantalón. En su cerebro sólo había imagenes, cada vez más calenturientas de su deseada princesa.
El psicólogo, que le visitó en su domicilio por la imposibilidad de gruñoncito de salir vestido de su casa/seta, tras una regresión hipnótica le recomendó unas píldoras de bromuro y sobretodo entregarse a una actividad intelectual que requiriera todo su esfuerzo mental. Así reunió a todos los enanitos y les pidió que visto el inacabable estado en que se encontraba y el consejo del psicólogo, le dieran todos los trabajos administrativos del bosque y se impuso la realización de un balance de consolidación de todos los activos y pasivos del bosque.
En esto estaba cuando aparece su asistente y NOOOOO!!!!! era ella, siempre ella, definitivamente estaba terminal. No había donde recurrir o no ..... efectivamente podía buscar la solución en la diosa madre de la tierra, no existía mayor poder en todo el bosque. Así, pues, a ella acudió para el remedio a sus males y Madre Tierra le aconsejó que si no podía vencer la tentación, debía abrazarse a ella y sucumbir, sucumbier tanto como le fuera posible y tantas veces como su cuerpo aguantara hasta que desapareciera aquella enorme erección.
Así, pues, como sea que esto no se puede aguantar ni un minuto más, acabaré por hacer caso a la Madre naturaleza,
Ganxó