Tienes una moneda de dos euros y otra de un euro. Has dicho que una moneda no es de un euro, pero no has dicho que la otra tampoco es una moneda de un euro.
Tienes una moneda de dos euros y otra de un euro. Has dicho que una moneda no es de un euro, pero no has dicho que la otra tampoco es una moneda de un euro.
El amor crea tensiones, el sexo las relaja.