Este frío y tanto vacío, cuando ya parece que no queda nada en que creer y te remontas a la infancia para mecerte en esa inocencia, la única, la de verdad, cuando y sólo entonces podías creer de veras.
Y ahora, en la nada, donde hay que seguir caminando, por inercia, por supervivencia, incluso por un tímido atisbo de esperanza, que descarado se atreve incluso a sugerir…sin prometer… que quizá el tiempo pueda pasar un velo y dejar que vuelva a resignarme a creer que existirá algo verdadero después de todo.
Verdad o mentira…ya… qué más da al fin y al cabo mientras ver a medias ayude a crear motivos para seguir.
Siempre se ha tratado de eso no?:
Seguir, seguir, seguir..
Cada piedra tropezada te recuerda la piedra anterior y parece no tener sentido lo ocurrido entre tropiezo y tropiezo. A este ritmo me voy a hacer un collar bien pesado.
Hoy no fue precisamente mi día...
http://es.youtube.com/watch?v=2BRSLSgNU3E