Y resulta que volvía yo esta noche de una calçotada (para los no catalanes, se trata de una especie de bacanal, basada en una clase de cebolletas asadas que luego vas mojando en una salsa. Una animalada, vamos...)
Bueno, a lo que iba. Que volvía yo de la tripada en cuestión oyendo el último de los dos pájaros (Serrat & Sabina) y en estas que me fijo en lo que dice la canción...y me digo: leches, pues igual sí...
Me refiero a lo de "y me envenenan los besos que voy dando..."
A ver, que quede claro que lo saco del contexto de la canción y que lo meto en el que estamos. Y también que quede claro que servidor no se arrepiente de nada, pero que empieza a plantearse el sentido de algunas cosas (será la edad, qué le vamos a hacer)
No sé...
Bueno, me parece que no hace faltar decir mucho más para que os arranquéis, ¿verdad?
Pues nada, avanti dos tercios...