Los cojones del Osito Feroz tienen mucha historia y dan para escribir un libro. Por ello es comprensible que ante una frase hecha y rápida que sólo él usa, la mayoría nos quedemos estupefactos y queramos descubrir los mil significados y significantes que esa frase puede llevar encerrados y sin encerrar.
Y nos quedamos sólo con la frase: "Mi pareja, después de un tiempo sin vernos, siempre me pesa los huevos" y dice "huevos" porque es más fino y tiene deformación profesional, pero yo me voy a la palabra metafísica verdadera y descriptiva como la vida misma: los cojones.
Que si nos quisiéramos entretener con la realidad misma, no con la frasecita de marras, los mismos cojones del Osito - aparte del libro enunciado -, nos dan aquí para elucubrar un rato largo con el permiso de mi admirada y venerada Marien, pozo sin fondo y mente despierta donde las haya,.....etc y de la deslenguada, caótica y adinerada Asiática.
Y regreso al tema sustancial que nos ocupa y nos preocupa, porque aunque le dediquemos un largo debate no creo que nos los acabemos en este rato. Porque los "cojones del Osito " - coño, ya suena poético -, son como la goma, se estiran, se alargan, se encogen y se recogen sobre sí mismos. O como una pluma, se cargan, se descargan y se vuelven a cargar.
Vamos, yo hablo por hipótesis metaquímicas, pero la mayoría de vosotras que habéis sido premiadas con la contemplación, adoración y tocamiento del tesoro que nuestro Osito Feroz soporta entre las piernas, lo podéis atestiguar de primera mano,..... bueno, de primara, no, que por lo menos los han tocado un par o tres de miles, antes. Pero seguro que podéis atestiguar por esas tardes y noches adornadas por sus descargas continuas que no miento, los cojones del Osito son una fuente de sabiduría, como Marien, no, una fuente de vida eterna. Al ver manar aquello y sucesicas veces, uno entiende, quiero decir,....una entiende fácilmente la teoría de los volcanes en erupción. Y no sigo por esta vía que nos estamos yendo a derroteros, caminos y senderos de perversión y vicio un poco prosaicos y terrenales,....aunque en erupción.
Pero también son como una goma de borrar, blandita y dura a la vez, suave pero rugosa cuando ya se ha utilizado por un punta. Y eso sí, eternos, borras y borras y no se agotan nunca, siempre vuelven a borrar y a borrar.
Bueno,otro día más, que luego las foreras de largas ideas y cortas uñas no tienen tiempo de leer estos rollos inútiles que aburren al más despierto, aunque entretienen y liberan la mente saturada del que lo escribe, pero eso, a costa de los demás y las demasas.
Advierto, no voy fumado, todavía y creo que vale la pena aderezar estas ensaladas metafísicas y trascendentales de los ahorrillos puteriles con salsas sustanciosas como ésta. Ah y saludos al Richard- bienhallado - que no me pise este post porfa, y al Petro que se guarde los besitos para alguna necesitada, que yo todavía vengo harto de estas fiestas de eso, besitos y....polvorones.