Noooo, Angel noooo, cualquiera menos Sánchez Dragó. Sintiéndolo mucho por aquellos grandes fans que se desviven y rasgan sus vestiduras en señal de devoción cada vez que asoma su semblante por televisión, he intentado empezar dos libros de semejante erudito y después de uno o dos capítulos desestimé acabar de leerme ambos libros para mantener a salvo mi salud mental y no caer en el más profundo hastío. Ni laberintos ni nada, es un plomo de tío que no me explico como es posible que pueda vivir de eso. Y encima se monta un programa sobre literatura en el que invita a escritores para que le oigan hablar a él mismo. Ni mi pade, que ya está más que jubilado el hombre, llega a ser tan cansino.
(Si hay algún fan de este individuo en este foro, lo siento pero esta vez no pienso pedir disculpas por mis comentarios. Si es que es un plasta.)