Lo mío más que una cuestión moral es un asunto de excesivo pudor o vergüenza, o uno de mis tantos complejos,vete a saber. En todo caso no me hagáis mucho caso, ya veis que soy un poco ratito.

Tests musicales post-coito; es una opción. Como la mayoría son universitarias, yo suelo hablar con ellas del bosón de Higgs, la situación político-estratégica en Oriente Medio o ya si hay mucha confianza recitamos a Rilke en alemán.
Las conversaciones cliente-escort dan para otro hilo.