Cita Iniciado por caballero_andante Ver Mensaje
hola a todos/as, y feliz año nuevo!

En este post, y ahora que empieza el año, quiero sincerarme… he dado muchas vueltas respecto a mi cambio de vida, intentando explicarlo, dando argumentos, etc, etc.., y también creo que a lo mejor he dado la impresión de dar lecciones a los demás, cosa que no era mi intención.

¿cuál fue el verdadero motivo de mi cambio de vida? Pues sencillamente, me encontré con dios. No físicamente, ni fue una aparición, ni un fenómeno sobrenatural, ni algo por el estilo. Fue una experiencia que viví hace tiempo, al ir a un retiro que me invitó una amiga. Aún no sé porqué fui. Supongo que no era feliz con la vida que llevaba.

Es muy difícil de explicar, de encontrar las palabras adecuadas... Cuando alguien encuentra algo tan hermoso y que te cambia tanto la vida, necesitas comunicarlo. No te lo puedes callar. Encontrarse con el amor de dios es como pasar de ver la vida en blanco y negro a verla a todo color full hd. Es como un tsunami de amor, algo enorme pero que te invade suavemente, y no puedes explicar porque es imposible que te lo hayas inventado, que ilumina y calienta hasta el rincón más perdido y oscuro de tu corazón.

Y por qué decir esto aquí?, qué raro no? Pues sí…, primero me daba mucho corte y pensé que sería una tontería y una pérdida de tiempo decir esto en un foro como este. Pero al final dije: Por qué no? Qué más da lo que piense la gente. Dios sabrá… tampoco es que vaya a hacerme cura ni nada de eso, pero sí que ha habido un cambio en mi vida.

Para terminar, que quede claro que por eso no soy mejor que nadie, ni mucho menos. No es ningún mérito. Seguro que aquí hay personas mejores que yo. Muchas veces le digo a dios cómo es posible que me ame tanto si soy un desastre. Pero incomprensiblemente me ama, y también os ama a cada uno de vosotros/as, aunque lo neguéis, le insultéis, o le ignoréis. Da igual, él os sigue amando.

Os deseo de corazón lo mejor para este nuevo año.
ego te absolvo a peccatis tuis in nomine patris et filii et spiritus sancti.