Navegando por Internet he encontardo este video, y no he podido hacer otra cosa que aplaudirlo y el sentirme plenamente identificado.
Echando la vista atrás no puedo sentirme más que decepcionado con la cantidad de valores, promesas y mierda que nos metieron en la cabeza. Nací a principios de los 80, fui un niño bueno, metía monedas de 25 pesetas en los sobres del Domund mientras los demás solo metían duros, repartí estampitas de mi comunión a "familiares" que no he vuelto a ver más y pensaba que el compartir y el ser bondadoso me llevaría a la felicidad ya encontrar el amor verdadero. Nada más lejos de la realidad.
Fui el primer miembro de mi familia que fue a la universidad, cuando el ir a la universidad importaba algo. Me transformé en el orgullo de mis padres ante sus vecinos y amigos. Creía vanamente que el mundo tenía un sentido, qué equivocado estaba.
Ahora sé que el mundo se va a la mierda irremediablemente y nadie se va tomar la molestia en salvarnos o en mover un dedo. El sistema de valores que regía nuestra generación (trabajo, familia, amigos....) ha sido sustituido por un anuncio del Corte Inglés. Allá donde pose mi vista solo encuentro mierda, estupidez y una ciega determinación en arrojarnos todos con una sonrisa en la cara al abismo, como los lemmings. He llegado a la terrible paradoja de que cuanto más sé, más me doy cuenta de que las cosas van peor. Es una preocupación que nunca tendrán los estúpidos ya que no saben nada de nada y viven en su pequeño corralito de estulticia y mentiras.
El Fin del Mundo no será en diciembre de este año, como dicen los mayas, el fin del mundo nos lleva años de ventaja pero aún somos demasiado imbéciles para darnos cuenta.