Iniciado por
lobolobito
Bueno, que no se entienda mal. Ahora me explico.
Anoche tuve una discusión con mi mujer, un indiscreto sms tuvo la culpa. En pleno momento de la discusión pensaba "para qué diablos me casé con ella?!". Pasado un rato, y solo en mi saloncito de trabajo, pensaba en cuando la conocí. Segundo matrimonio para mi, segunda relación seria para ella.
Era habitual de spalumi, aveces entraba en bcnrelax, pero el tema está muy desertico allí y spalumi ya no es lo que era a sus inicios. He leído mil y una historias, tanto en el foro, como en los "pasillos". Muchos foreros presumen de ir con tal escort o tal otra. Presumen de secretos que ellas les puedan contar. Tristemente, y con el tiempo me he dado cuenta, que cuando el dinero se acaba, como a muchos les ha pasado, pues la pasión de ellas se va por la ventana.
A cuantos de vosotros no os ha pasado que una vez los negocios no van bien, ellas empiezan a tener dolor de cabeza, a hacer caras, y estar distantes, cuando meses atrás y mientras ibas suministrando el sustento, todo era sonrisas y alegrías en la cama. Haciendo una pausa, me ha venido a la cabeza que una vez una escort, me afirmó, a modo de confidencia (a mi y a 25 más claro está) que aceptaba el griego con algunos clientes, aunque ponía claramente que no, porque simplemente la tenían pequeña. Luego leyendo las experiencias colgadas, te descojonas cuando lees que alguno se siente privilegiado por haber accedido a ese maravilloso agujero.
Imagino que hay de todo en el mundo de la prostitución, pero si algo está claro, es que comenzando algo con dinero o favores por medio, es media o nula relación de futuro, porque cuando se acaba el fuego de los euros, se acaba la pasión de ellas.
Encima, para quedar con las escorts, nos ponemos como si fuéramos a la iglesia, duchaditos hasta el más remoto rincón, perfumados, dientes impecables, afeitados. Ponemos el dinero encima, nos las llevamos a cenar (yo no, tengo como norma que sexo y solo sexo, para cenar tengo a mi mujer), ellas con una sonrisa de anuncio de tv. Nos la chupan como si fuese la mejor pelicula porno. Las penetramos de la manera que queramos. Vemos que se corren (entre comillas) y terminamos pensando que si el cielo se parece a esto, ya estamos listos para morir.
Echamos la vista atrás y creemos que eso no lo tenemos en casa. Pero es que en casa nos aguantan los pedos, los malos dias de trabajo, el mal humor después de un viaje de trabajo, vernos afeitar, lavarnos los dientes, nos meten la ropa en la lavadora (o metemos nosotros la de ella, para el caso el mismo nivel de intimidad), oimos a los niños llorar, patalear porque no pueden seguir viendo la tv mientras comen.
Pero esa que tengo yo en casa, me aguanta todo esto y más. A cambio ella espera que esté cada noche con ella, que la llame un par de veces al día si puedo, y que la lleve a cenar de cuando en cuando, al menos una vez al mes. Y yo mirándome al espejo no entiendo el motivo, si ella podría estar con quien quisiera, no entiendo como puede estar con un tipo como yo.
Tengo amigos que presumen de estar solteros, y no deber ningún tipo de explicación a nadie de cuando entran o salen. Yo les envidio, anoche les envidiaba. Pero luego, pasado los enfados, y mientras me mantengo despierto en muchas noches, tengo a mi mujer abrazada a mi. Aveces se levanta por la mañana y sonríe. Entiendo entonces porque me casé con ella.
No dejaré de ser un putero. El vicio es demasiado grande. Si algún cometiera la idiotez de enamorarme de una escort, pues me divorciaria, porque mi mujer se merecería más que un patán enchochado de una escort. Si luego mi historia acabara mal con la escort (99,99%) pues jodería sin más.
Perdonareis el discursito, es que no tengo donde soltarlo. Ya sabeis, la doble vida tiene eso.