
Iniciado por
Marchito
A veces me siento afortunado. Me siento en la barra de un bar, en la mesa de un restaurante, en la terraza de un boulevard y voy escrutando el desfile de vanidades.
Me preocupa lo que veo....parejas y más parejas sin un ápice de morbo entre ellas..meros estereotipos que reflejan la necesidad de apostar por lo convencional.
En esos momentos me siento afortunado, sé que aunque la rama en la que estoy apoyado es muy frágil y se puede quebrar, estoy tranquilo, mis alas en forma de escorts me permitirán levantar el vuelo.
Amén