Iniciado por
icaro69
...la fantasía una vez ha conocido, se encoge de brazos. Y aguarda paciente, es más que improbable se dice, se repite, se convence.
Es una puta certeza.
La imaginación busca la nuca para dejar de mirar atrás. Esos ojos que todo lo ven, que nadie los ve.
Los sentimientos burbujean y espolean adagios.... rítmicamente nos atormenta la manera como los impulsos y las emociones nos vencen. Es de recibo, que el encuentro se tan improbable como exquisito.... porque ahora, una vez que la miel encontró una planicie donde fundir.... las abejas huyen entre adoquines y gotas de aire.... para convertirse, en capullos, en gusanos de seda... para tejer lo que las hormigas laboriosamente acopian en las entrañas de la lealtad.
Caen como granos de arena que picotean el tronco del reencuentro con uno mismo, sin quererlo se desprenden las primeras hojas que al nacer buscan enfilarse, acurrucarse y vertebrar el camino perfecto. El árbol solitario en un bosque encantado.
Pero no existe.
Ese caminito estrecho, ardúo y de cantos redondos, ingrávido...libre sabe despeñarse donde las ramas secas aman las últimas gotas, donde la jara y la retama se escurren para incluso de una piedra volver a brotar.
Ese júbilo, esa catarsis, esas gasas, aquellas bambalinas del pestañeo.... cuando son tan sinceras nuncas las olvidas, nunca acaban por desaparecer. Y aunque pasen siglos hasta que nazca otra piedra, vuelven a desgañitarse, a abrir sus brazos para encontrar el camino perdido...y no basta con rodar, y dejarse caer, y no basta con hacer volteretas y pizpiretas entre molinos de sombras y jolgorio de chiquilladas.... lo auténtico, siempre se deja querer.
Aunque a la fantasía le duelan prendas en reconocer, encogida de brazos, que aquello fue un paseo entre los mimos sin guantes, carne con carne. Alma sobre alma.
Querida fantasía se te acabó el cuento, ahora tienes una larga vida por delante.