Abro este hilo para que, si queréis, comentemos los regalos muy especiales que recibimos u ofrecemos en estas fechas.
Y lo abro porque me apetece mucho explicaros uno que he recibido hoy.
Me lo envía un viejo amigo de Milán, que bien pudo ser mucho más que amigo, y ejerció de casi padre por breve, brevísimo período. Le llamaré, S. Nos unió una pasión por su hija, Tirtzia, y dos largos fines de semana maravillosos en su villa de los Lagos. La arena del más sagrado de los desiertos se quedó con Tirtzia hace muchos años. Pero S. continúa llamándome Hijo.
No podré corresponder nunca con esos regalos, sino recordando todo lo que significan. Y es curioso, han pasado casi 20 años desde el primero y sólo hoy acerté a escribir a cerca de ellos.
El de este año fue sólo un libro, pero un libro muy especial. Es una reproducción facsímil de un códice de Leonardo, el del vuelo de los pájaros. Una maravilla confeccionada en el mismo papel original, con la misma ligadura de tendones animales que se utilizaba en la época. Insignificante, pequeño, frágil... En cada dibujo, Leonardo plasma un instante del vuelo del pájaro, de la exacta posición del ala, de los huesos, músculos, tendones y plumas... Sin fotografía digital. Solo observando y memorizando. Otros dibujos hacen referencia a mecánica e hidráulica, pero nada comparable a lo que la retina del genio era capaz de congelar para la historia...
Y la tarjeta del viejo amigo, casi padre, S. que lo acompaña, siempre con las mismas palabras, Mio caro figlio, .
Por Tirtzia, el 25 Kislev de 5769, inicio de Januká
Oliba