Tema: Cuéntame como pasó.....

hola Trave

Te cuento: recuerdos difusos de hace muchos años. En tiempos de adolescentes, teniamos una represion total. Como sabes, tener sexo con chicas normales, era tarea casi imposible. Como mucho, algun beso y sobeteo. Asi que con mi grupo de amigos (barrios marginales) aprovechabamos alguna escapada a Barcelona para conocer el barrio chino. Calle Robadors, de las Tapias...Nada que ver con el raval actual. Edificios semirruinosos, bares y mas bares. Yo vi lo que cantaba serrat, "gomas y lavajes" en las ventanas de muchos pisos. La imagen de la prostitucion que ofrecía, a mi me inmunizó para muchisimos años: mujeres bastante mayores, acabadas, la mayoria muy gordas, fisico ajado, cutrez, servcios de diez minutos, con los clientes esperando a la puerta del garito... Realmente era un mundo prohibido, quizás muy estimulante para novelistas, poetas, tipos sensibles...
A pesar de todo, y aunque ahora hay quien se escandaliza por el inicio de chicos jovenes en este mundo, entonces, muchos chicos, esperaban, como una forma de ritual de iniciacion, tener el dni que acreditaba los 18 recien cumplidos, para estar con una de estas mujeres. Les acompañé a varios de esos regalos de cumpleaños, pero nunca subi (siempre habia una escalera) con ninguna.
Pasaron, al menos 30 años... pero esa es otra historia ...

Con el siguiente relato medio autobiográfico me presente a un concurso organizado en otro foro.

Barcelona, 30 de Agosto era un día caluroso y soleado. Como cada día Ricardo había ido a la Biblioteca central a estudiar las que le habían quedado para septiembre, buscando un lugar fresquito donde las hojas no se pegasen a los brazos.

Como todas las mañanas a las 11 salió a relajarse un ratito paseando por las calles Fernando y Boquería, se tomaba un desayuno y se entretenía revolviendo viejas librerías cargadas de tesoros. Pero había una cosa que cada vez le llamaba más la atención, eran unas señoras que le miraban directamente a los ojos, la palabra Puta dejaba de ser un taco para tomar forma de cuerpo, cada vez más se sentía atraído, las buscaba, las localizaba y se inventaba una historia con cada una de ellas, pero seguía sin poder aguantar el descaro de esas miradas.

Estaba mirando unos comics de Juan Centella cuando alguien a su lado le dijo “Hola guapo, quieres que estemos un ratito juntos”, el se giró allí tenía una mujer sin edad que le miraba, esta vez no tenía que bajar la vista, no quería perder aquella mirada exclusiva para él, “Si” titubeo. “Son 2000 pesetas” dijo ella, “Si” volvió a titubear él. Con un gesto ella le indico que le siguiera, él obedeció, mientras seguía aquel personaje pequeñito y delgado pensó, que guapa es, aunque no sabía porque, por su lado sus intestinos decidieron montar una revolución.

Tras un par de portales entraron en un edificio lúgubre y oscuro, en la portería hubo que hacer un pago, por el pasillo una propina a la gobernanta. Ricardo penso “todavía me quedan dos monedas de 25 pesetas en el bolsillo para volver a casa, espero que no queden más pagos”. En la barriga tenia dos ascensores que no cesaban de hacer viajes de arriba abajo.Por suerte la habitación era sencilla pero se veía limpia.

Se desnudaron, Ricardo nunca había visto una mujer desnuda, no tenía nada que ver con las de las revistas. Ella tenía una piel muy blanquecina y fláccida y los pecho pequeñitos colgaban mirando el suelo. Con respeto y permiso acarició todas aquellas partes nuevas para él, le gustaba, ella empezó a acariciarle el miembro, lo meneo, lo succiono, pero allí estaba encogidito como en los bebes. No sabía lo que tenía que hacer, el miembro estaba averiado, tras 20 minuto de caricias Ricardo pensó que lo mejor era dejarlo, ella no puso objeción.
Salio corriendo a la calle intento respirar aire fresco pero no había. Dios mío que he hecho, y si cojo alguna enfermedad. Fue a su casa tan pronto como pudo, Por suerte su madre no noto nada. Se dio una buena ducha restregando fuerte por todas partes. Cuando acabo se miró el miembro preocupado, lo probo y en un momento vio que otra vez funcionaba correctamente,”Menos mal”.

Aquella misma tarde se dirigió a su parroquia para confesarse, con la sana intención de no volver a hacerlo nunca más. Por secreto de confesión nunca se supo si el pecado era contra la pureza o simplemente el de haberse dejado los libros en la biblioteca.

Iniciado por travesura_bella

Hipo!!!! Buenísimo.

Que año era más o menos?

1978

Hola trave

En estos ambientes no se veian chicas jovenes. Las jovenes estaban en los clubs (barras americanas) o en pisos muy privados. Eran "invisibles" para la mayoría.

Fiuuuu !!!
Parece que estamos de recuerdos.
EL otro día el post que abrió summum sobre religión- prostitución, ahora Trave pregunta por los siglos pasados, jo... que hartón de recordar.

Mi primera experiencia fué una masturbación, antes llamada paja, en un cine del barrio de Horta. Allí te sentabas en las últimas filas y acudía solicita alguna señora (rondando los 50 años) y por 25 ptas. te la meneaba.

La primera experiencia de cama auténtica fué, como casi todos en el barrio chino, por lo que puedo leer aún tuve suerte y no pillé una cincuentona, "la María" debía tener treinta y algo, pero la verdad es que estaba bastante deteriorada, maquillada con kilos de pintura, y una sombra de ojos azul eléctrico.
Entré con un amigo en un bar cutre a tope pero por lo visto "de calidad", el colega ya era gato viejo en el tema y sabía por donde moverse. A lo que iba, solo entrar me coge "la María" por el hombro y me hace la típica pregunta: ¿Donde vas, guapo?, mi colega me mira, se ríe y asiente, así que me lanzo ¿Cuánto cuesta?. Sin contestar me estira del brazo y me lleva hacia el fondo del bar, allí habla con una mujer mayor y me dice: dale 50 pesetas, coge una toalla, o al menos lo parecía, y subimos a la habitación (en el piso superior " los apartamentos por horas" jajaja!!), allí me sopla directamente de la cartera las 150 pelas que llevo.
Me hace desnudar, "no hace falta que te desnudes del todo, con lo de abajo ya vale" y me lava los bajos en una especie de bidet, no era un bidet como lo entendemos ahora, pero es para que os hagais una idea.
Se quita la ropa y se lava ella mientras me va hablando, no tengo ni idea de lo que me dice, estoy ya en una fase nervioso-catatónica que me ofusca totalmente la mente, solo veo sus tetas y su sexo, mirada fija y al frente, como en la mili.
Me hace tumbar en la cama, agarra mi herramienta y después de darle unos cuantos meneos y ponerla en primera posición de saludo procede a metérsela (continua hablando sin parar, y continuo sin escuchar nada de lo que dice), yo solo veo que está dentro y que al cabo de un rato, no se si un minuto, cinco, o diez, ya he perdido la noción del tiempo, bueno, pues eso descargo. Se rie, me felicita, y "venga majo lávate", lo hago, me visto mientras ella se lava, y me despide con un "vuelve pronto guapo".
Bajo las escaleras flotando, como en una nube, mi amigo que está esperando abajo me recibe con risas y cachetes en la espalda.
Salimos del local y hasta al cabo de un par de horas no aterrizo en el mundo real, ya he follado !!!
Tengo diecisiete años, dos meses y tres días, soy un privilegiado que ya se ha estrenado, la envidia de mis amigos.

Ni que decir tiene que iba con un carnet de conducir apañado en el que rezaban 19 años.