Pues parece ser que la cúpula se cae a trozos. Tres semanas escasas desde su inauguración el suelo del emiciclo (o ciclo entero) aparece sembrado de escayola multicolor. Alegoría mal sana de la europa de las civilizaciones...escayola de multicolor. Y la ONU...con esos pelos. La han pillado, como siempre, con el paso cambiado, entre Kofi Anan y su corrupto hijo (el del programa "alimentos por petróleo"). No hay rubor que valga para esta pandilla de vividores. Han escondido durante estos últimos quinquenios, debajo de la alfombra por la que desfilan cascos azules cobardes (ay holandeses, cuanto tardaremos de olvidar Szebgrenija) y delincuentes (alguien deberá condenar a los espabilados de la UNPROFOR que se dedicaron a violar a mansalva), su inoperancia para derrotar al hambre, la enfermedad y la desigualdad.
Burócratas vividores con pasaporte diplomático y prebendas de magnate. No hay espacio para la verguenza en quien acepta una obra de 20 millones de euros; ya se avergonzará el pueblo llano en su lugar....o quizás no. Volveremos a arquear las cejas, pondremos cara de Netol y responderemos con un "no coment", que se note que durante los últimos cinco años algo de inglés hemos aprendido.
¡Qué asquito me doy!...hay años en los que no me soporto.
saludos.