Yo vivo el escortismo, como a mí me gusta llamarlo, con muchísima tranquilidad de espíritu, de mente, de corazón, y de todo. Mucha. Pero soy consciente de que no hay vuelta atrás, y si algún día, por lo que sea, deseo no haberlo vivido, ya será tarde. En mí, individualmente, haberme dedicado a esto no tiene ninguna consecuencia negativa, en absoluto, todas positivas. Pero de cara a una posible relación de pareja (que ahora mismo no me planteo) creo que sí puede afectar, y quizá mucho. Tal como yo lo veo, estoy "condenada" a una de estas dos opciones:
1) Encuentro un hombre (o una mujer, y yo qué sé...) fuerte, muy fuerte, que lo sepa y no le suponga ningún problema, que entienda que lo vivo, o lo viví, bien, estando tranquila conmigo misma y separándolo completamente de una relación de amor. Que no sienta amenazada su masculinidad ni su seguridad en sí mismo.
2) Oculto que lo he vivido. Tengo que estar siempre precupada de proteger el secreto, y corro el riesgo de destrozar a la persona y finiquitar la relación de pareja en caso de descubrirse.
Yo de momento no veo más alternativas
Por cierto, si alguien conoce al Sr 1), por favor denme su teléfono y díganle que dentro de un tiempo, cuando esté preparada para una relación de pareja, le llamaré...