Si te fundes....
Con la guadaña de tus pezones, me arrancarás de cuajo la levita que esconde el faro.... montículo de fresas envainadas para descarnar su jugo en el oasis de tú ombligo y así alumbrar, la sonrisa de mi plexo trémulo, excitado por el rasguño que atraviesa de costa a casta....el claustro de mis devaneos....la lujuria de tus uñas.
Clávate. Clávamelas.....
No hagas de esa esporádica travesía una ristra de ilusiones....entreabre tú boca, afila tus incisivos...que tus molares sientan la fibrada luz del jadeante silencio....escápate como cuando de mujercita descubriste las esquinas convexas de las perlas de tú escondite preferido....y ahí me tendrás entre el bosque de tus labios, bebiendo de tu ardiente canalillo, que siempre, siempre, siempre, desemboca en esa encelada sensación que cosquillea a los deseos y traiciona a la razón.
El placer se recrea en el oscurantismo y sus caricias fieles servidoras de su indolencia. Me gusta que te ofrezcas a ti misma el sacrificio del escozor....duele, palpita, lisiado, inflado, rojovivo...mar muerto por aquel sastre del gozo....sólo has de chasquear los dedos y untar en aceite caliente la aureola que estremece ese dolor tan gustoso y obediente.
...toma tus brazos y enciérrame en el ritual de tú antojo. A mí me empieza a parecer que un enjambre de hormigas negras pasea por mi cerviz, con la raíz de tus cabellos más ocultos....entre sus pérfidas membrnas....juego de laiosx.
Huele a hembra, a designios traviesos....y eso empieza a endomoniarme, a acrecentar la ira más jocosa.... me muerdo la lengua y cruzo mis piernas.
Ábrelas, son tuyas.....si las mereces.