Estabas con tu mano agarrando mi miembro por encima de la toalla cuando me llevaste hacia ti.
Notaba tu pecho clavado en mi espalda y como tus labios soplaban poco a poco detrás de mi oreja.
En este combate no quería perder y rápidamente me giré pera verte mientras caía mi toalla. Aún llevabas el top y el short del combate, pero estabas preciosa.
Al caer mi toalla empezaste suavemente a acariciar mi prepucio, muy suave mientras con la otra mano masajeabas mis testículos y con tus dientes mordías suavemente mis labios diciéndome, “¿crees que podrás aguantar este round?”
Pase mis dedos por tu espalda aún mojada por el sudor deslizándolos, casi arañando tu espalda hasta notar como te estremecías.
Subí tu top y empecé a lamer lentamente tus pezones, con pequeños mordiscos los cuales hacían que aún se pusieran más duros y tu mano agarrase más fuerte mi polla.
Cogiendo con fuerza mis testículos me hiciste poner de puntillas y con tu otra mano me empujaste hacia atrás cayendo encima de la mesa.
Empezaste a besar mi pecho y también a morder con tus labios mis pezones, mientras con tus manos seguías masajeando mis testículos y con un dedo acariciabas mi ano.
Levantaste la mirada y fijando tus ojos en los míos mientras penetrabas un poco tu dedo en mi ano me dijiste “jeje no voy a ser tan mala como para en un mismo día ganarte y darte por el..…..” y hiciste un guiño.
Bajaste lentamente tus labios hasta llegar a mi prepucio y empezaste con tu lengua a lamerlo como si fuera un helado italiano de crema…. Poco a poco lo fuiste introduciendo más en tu boca hasta llegar a perder la visión de el.
Cogiendo suavemente tus pelos por tu coleta te separe de mi miembro llevándote hacia atrás contra la pared.
Una vez allí mientras mi mano subía lentamente por dentro de tu pierna mis labios se perdían por tu cuello, hasta que mi dedo noto tu clítoris, grueso, mojado, caliente.
Poco a poco lo masajee mientras intercambiábamos pequeños roces con nuestras lenguas, para poco a poco acelerar el ritmo…
Habrías la boca a cada espasmo de tu cuerpo, gimiendo, haciendo tus miauuuuu….
Te baje el short i te penetre de pie mientras tu cogías mi espalda con tus piernas y rasgabas mis hombros con tus manos.
Poco a poco te lleve hasta la ducha y cuando tuve tu espalda contra la pared, abrí el agua …
Primero salió un chorro de agua fría que hizo estremecernos, mi polla entro lo más profundo de tu ser mientras tu vagina se contraía con su máxima fuerza.
Poco a poco tus piernas fueron resbalando por mi cuerpo hasta que quedaste de pie, te gire de espaldas a mí y te agarraste al palo de la ducha, empecé a besar tu espalda empezando por tu culo y subiendo lentamente hasta tu cuello….
Una vez allí incline tu cabeza hacia atrás mientras besaba el lóbulo de tu oreja y mi polla penetraba de nuevo dentro de ti, mientras tu como una gata te contorneabas poniendo tu culo más en pompa para que pudiera penetrar mejor tu vagina.
Lentamente te besaba detrás del cuello mientras mis manos perfilaban tus dulces y duros senos.
Hasta el momento que mi cuerpo no pudo más y libero todo la poca energía que quedaba dentro de él en un orgasmo único, quedando con todo el cuerpo agarrotado y desplomándome posteriormente en la ducha del vestuario.
Te giraste y mientras contemplaba tu tostado y delicioso cuerpo me dijiste… “me sabe mal pero yo no he llegado aún, o sea que el round aún continua y me parece que volveré a ganar”
A mí sólo me quedaban fuerzas para responderte con una sonrisa y saborear como lentamente volvía a estar dentro de ti….
Fue el tercer y último round y cómo sabes de nuevo ganaste
Un besazo a la musa de mis relatos y el ángel de mis noches de guardia.