Guiado por mi afan de cristianizar el Imperio de Tarraco y de yacer con mujeres bellas... decidi el viernes pasado hacerle una visita a Tatiana.

Demasiado tarde, puedo afirmar que ya no esta en la casa de Eva. Lo cual me impedira dar una opinión sobre ella.

No obstante he de manifestaros que me fueron dadas por Eva otras alternativas, por lo que tome la decisión de dejarme tentar...y doy gracias a Dios y a Ellas...

Pero este es otro sermon que no tiene nada que ver con Tatiana. Posiblemente merezcan una enciclica a parte...