Aunque sea tarde iré subiendo mis experiencias, empiezo por la primera:
FECHA DE LA EXPERIENCIA: 23-3-2008
NOMBRE DE LA ESCORT: Jamilé
NOMBRE DE LA AGENCIA/PISO/CLUB: Felina
WEB: https://www.felinabcn.com/
DIRECCIÓN: en la web
TELÉFONO DE CONTACTO: en la web
TARIFAS APLICADAS: 130 + 80 Griego/h
DETALLES DE LA AGENCIA/PISO/CLUB: Instalaciones correctas
DETALLES DE LA ESCORT: Un cuerpazo, simpática y cariñosa.
VALORACI0N DE LA ESCORT: de 1 a 10 => 8
Te recibe una chica con una sonrisa fenomenal y te instala en una de las habitaciones del club. Te pregunta que si quieres tomas algo y al momento el desfile de chicas, SORPRESA, solamente aparece una chica, aunque no tuve mucho que escoger la verdad es que era guapísima con un cuerpazo y la simpatía personificada. La encargada me dice que tienen overbooking y solo está disponible Jamile, que me la recomienda y puede hacer el servicio que yo quiera, le contesto que me parece bien. Precio pactado con griego incluido (era mi primera vez, en griego claro). Jamilé entra de nuevo y me doy cuenta en un momento que promete, entablamos conversación y en pocos minutos estamos los dos en la ducha, algo pequeña pero así incita al roce, empieza con caricias a lo que me sumo con gran placer, nos masturbamos mutuamente y detecto en ella una gran predisposición al sexo, salimos de la ducha y ya en la cama empieza a besarme por todo el cuerpo (piquitos en la boca), se empieza a caldear el ambiente, francés sin delicioso, se alarga hasta que mi osito está en su mejor momento, sigue con un masaje con sus pechos por todo mi cuerpo, acabamos en un 69 (me reservo comentarios). Me pone el preservativo y pregunta en que postura me gustaría el griego, por descontado a cuatro patas y por detrás, empieza la acción, bien lubricada y con cariño me dice que empiece suave... suave.... cuesta un poco al principio pero el osito entra en la cueva y se mueve acompasadamente, cada vez busca más profundidad, a ella le gusta, a mi también. Lo que en un principio era suavidad y poco a poco, se convierta por su parte en un movimiento desenfrenado, yo sigo el ritmo y le empiezo a masajear el clítoris. Después de varios minutos cabalgando como John Wayne en La Diligéncia, el éxtasis nos llego mutuamente. En esa posición y mirándome me dijo "creo que por hoy ya he cumplido" y era así un polvo de los que dejan huella, por lo menos en mi caso. Nueva ducha con conversación amena, despedida y besitos. Una mujer muy recomendable.