FECHA DE LA EXPERIENCIA:29/09/2007
NOMBRE DE LA ESCORT: Anuncio de Loquo. Angelina (argentina) en girlsbcn.
WEB: http://www.loquo.com/ps/contactos/eroti ... 00/5537028
DIRECCIÓN(si fuera el caso): c/. Córcega con c./ Casanova
TELÉFONO DE CONTACTO:630323462
TARIFAS APLICADAS:180 euros, incluído griego.
DETALLES DE LA ESCORT:
Nacionalidad: Argentina
Estatura:1.65, aprox.
Rostro: Sonrisa atractiva, ojos marrón, y una gestualidad propia de su experiencia. Será capaz de provocar morbo, sólo con un simple guiño.
Pechos: Operados, y definitivamente extra-firmes.
Trasero: Apetecible, turgente, uno de sus rasgos más llamativos.
Olor corporal: Sin quejas negativas.
Hábitos destacables: No fuma, al menos su aliento indicaba eso.
Personalidad profesional: Es su carta de presentación mejor cuidada. No deja de ser simpática y ofrecerte mimos. Seductora, en pocos momentos recordé estar con una mujer de pago. Y esa es su aptitud mejor desarrollada.
Se anuncia también en girlsbcn, y el forero Zeta ya nos la recomendó hace unas fechas, en un, por momentos controversial hilo. Sin embargo, debo reconocer, que sus pechos operados, no me proveían mucho ánimo de conocerla. Ahí juegan mis gustos.
La llamé una hora antes, a eso de las 17:00; me explicó lo esencial de la relación tarifa/servicio; mientras despedía, supongo a algún cliente anterior. No me dijo que se negara a servicio convencional alguno.
18:00, llego puntual, vestido de manera casual. Me recibe una linda sonrisa que me invita a pasar; dos besos y tal mirada de complicidad que tomé por acertada mi tarde sabática. Todo esto adornado con la vestimenta de colegiala, que eleva la tensión al grado de morbo.
Hay una notable dicotomía en el encuentro con Angelina.
Puesto que como rasgos de escort argentina, adherido más que aprendido; sus frases son del siguiente tipo:
-¿te gusta mi colita?
-¿querés garcharme morocho?
-mmm si fueras mi novio, te pediría que me lo hicieras siempre ésto mmm
Pero lo destacable, es que lo mimetiza tan bien, que sufres un estado de realismo, que interiormente percibes artificios fogosos sin llamarlos impostura.
Sus besos son continuos, sus abrazos lo mismo, la implicación es, al menos en ella, inmejorable, por su peso y estatura es formidable su adaptación a las posturas y sabe como pocas, calentar el ambiente con su amplio repertorio de viciosas frases al oído.
Su servicio de griego es majestuoso, (previa comprobación de dotación, según me dijo); lo prepara con lentitud e importancia grácil; mientras ella misma, luego de la lubricación precisada, introduce lentamente con su mano el pene erguido, despojándose de gemiditos de consentimiento. Poco a poco irás sintiendo la presión ejercida por la estrechez del espacio, centímetro a centímetro notarás ser recibido como una parte de su cuerpo echada de menos, para después, con su mano liberándolo todo, observar esa deliciosa imagen de lograr penetrar en un sitio que cuanto más prohibido es más apetente.
Resumiendo, es una simpatiquísima rubia, de recomendación segura.
Y como sucede con cualquier mujer, has de saber tratarla para esperar de ella su más imponente líbido sexual.
Dato curioso: Finalizada la relación, me despido y nos deseamos suerte.
Bajo con esa tranquilidad post-coito tan conocida, me dispongo a salir a la calle y oh sorpresa!, puerta cerrada.
Uno, dos, tres intentos de abrir. Pánico, miedo escénico; más bien tonto porque a esas horas no había nadie.
Raudo, subo otra vez, y le digo que estoy encerrado.
-No te preocupes amor, ahora bajo contigo y te abro. Los sábados suelen cerrar por seguridad. Dejá que me vista que estoy en pelotas.
-Vale.
Salimos, y en el ascensor realiza un intento de violación que con ese top ajustado y esos tejanos apretándoselo todo, la arrimé a la pared y le metí mano hasta por los botones del ascensor.
Muy bueno, notable manera de hacer que regrese.
Finalmente abre, me da un morreo asfixiante y me dice:
-Cuando te vengas conmigo a Argentina, te voy a garchar como nunca en el living de mi departamento, morocho.
Y si, pero lo del viaje a esos lares ya es otra historia...
Saludos.