No podría acerlo Osito. No creo que deba interpretar la libre expresión como afrentas personales.
En cualquier caso, me queda el consuelo de leer en tu post que no hay mensajes subliminales subyacentes en lo de "prepotentes". Porque incluso en el supuesto caso de que los hubiera, con certeza puedo certificar que nada más alejado de la realidad.
Soy un amante confeso del vocabulario y un sibarita recalcitante de todo cuanto pueda saborearse o disfrutarse empíricamente. Principalmente Kinestésicamente (acariciar) aunque una vez atiendo con atención a la información de que tu profesión es la de artista de los paladares, debo confesarte, que saborear y degustar (a todos los efectos) exquíteces cocinadas con mimo es un preámbulo casi de obligada factura, antes de atender siquiera a imaginar empezar a seducir esas bellezas que nos reunen aquí para intercambiar ociosamente pensamientos y divagaciones varias. Invitarlas a sentarse ante la mesa para seducirlas previamente y luego conducirlas sin prisa al diván del deseo.
Mis saludos, más allá de las supuestas prepotencias, incluso ante negaciones de subliminalidad, mi más sincera y honesta disconformidad. Lo desmiento incluso en el caso de que se hubiera llegado a afirmar.