Este es mi primer post y creo que es más que justo comenzar con una experiencia propia. Antes de nada quisiera agradecer a todos aquellos foreros (tantos que mejor no nombrarlos por si me descuido de alguno) que nos iluminan el camino a los poco iniciados en este bello arte por sus consejos a la hora de dar el primer paso. Son tantas las dudas que afligen al inexperto que una voz amiga es siempre una ayuda, en especial para saber cuando hay que dar media vuelta frente a situaciones sospechosas. De nuevo, mil gracias.
FECHA DE LA EXPERIENCIA: finales del 2006
NOMBRE DE LA ESCORT: Karina
WEB: http://www.milcontactos.com/barcelona/g ... ncipal.htm
DIRECCIÓN(si fuera el caso): no voy a ser yo quien lo diga
TELÉFONO DE CONTACTO: 610 003 384
TARIFAS APLICADAS: 150 €/h
DETALLES DE LA ESCORT: Nacionalidad: rusa, creo. Edad: 20-22. Constitución: tal como aparece en las fotos. Tatoos y/o piercings: no. Fumadora: al menos delante mío, no. Sexo: depilado, precioso, jugoso, con ese sabor a mar. Carácter: agradable y servil.
PUNTUACIONES DE LA CHICA: no formo parte de ningún jurado, pero a mí me pareció sumamente atractiva.
EXTRAS SEXUALES: Francés: sin. Terminado oral: no, no le dí ocasión para ello. Besos: muchos, pero sin lengua. Griego: no lo pregunté. Temática sado: nooo. Masajes: no, para eso voy al masajista. Repetiría: sí, sin lugar a dudas, pero me gusta la variedad.
Llega el día en que me decido y quedamos a las cuatro y media. Me recibe en su piso con una camiseta de tirantes blanca con letras rosas y unas braguitas coulotte de blonda elástica rosa. Preciosas. El piso no está mal. La habitación no es muy grande, pero más que suficiente. Tampoco el baño está mal, donde me doy una ducha a solas. Cuando regreso a la habitación, ella se había quitado la ropa y ya estaba completamente desnuda. Lástima, me iba a comer esas braguitas tan monas.
Empezamos con unos besos y directamente desciendo y me hago una bufanda con sus piernas. Delicioso. A mí, personalmente me encanta la fruta madura y más cuando está pelada. Hace gestos de que se corre, finge. Me empieza a hacer un francés sin algo brusco y tengo que ir dando indicaciones. Ese toque de inexperiencia me pone más cachondo todavía, por lo que le digo que me ponga una goma. Empieza a cabalgar encima, al principio con poco ritmo pero a medida que le cojo el culo (duro, duro) va cogiendo la onda. Su implicación se hace más que evidente en esos instantes al adoptar posturas un tanto incómodas para ella, pero altamente satisfactorias para mí. Cambiamos de postura varias veces y, agarrando ese culito tan duro, me corro A4.
Unos minutos de descanso. No tiene muchas nociones del idioma, así que la conversación es algo atascada. Le comento repetir y responde afirmativamente.
La coloco A4 y le vuelvo a comer todo el coño desde atrás. Me encanta esta práctica y a ella seguro que también. Esta vez se corre de veras. Me vuelve a hacer un francés sin, ahora algo más suave pero con contínuos cambios de ritmo (uf!). Viendo que me iba a correr y pensando en echarle otro le digo que pare y me pongo yo mismo otra goma. Misionero, aunque esta vez las caras que ponía eran otra cosa. De lado. Y finalmente A4, donde me corrí más a gusto que antes.
Al final, tuve que decirle yo que ya era hora de irme porque no parecía que tuviera mucha intención de echarme de allí. Después de vestirme, pagué el servicio, que ya me resultó raro que no me lo comentase antes.
En definitiva, una gran experiencia que recomiendo a cualquiera que, como es mi caso, le vaya el rollito teen con pequeños toques de inexperiencia.