Tema: Un buen masaje erótico y estimulante con final muy feliz: Paloma

Paloma
http://www.zentantra.net/masaj-fem/

Cuando: 10/2013 - Ciudad: Barcelona - en Local Agencia o Club

Valoracion experiencia -->9
FX rank -->9

Duración del encuentro: 60 minutos

Precio: 140 euros

Lugar del Encuento: Local Agencia o Club

Valoración Apartamento: 7

¿Pecho?: Natural

¿Fumadora?: No lo sé

¿Besa?: No besa

¿Griego?: No

Valoración Estética: 9

Valoración del Servicio: 9

Tenía ganas de probar un masaje diferente a todos los que me habían ofrecido anteriormente.
En la web de Zentantra pude ver como habían ciertos complementos muy interesantes a los masajes que normalmente ofrecen los centros de esta clase. Efectivamente, uno era "cunilingus" y otro "ducha eròtica". Opté por el tailandés con estos dos complementos.
Y como masajista no dudé en escoger Paloma, que en las fotos estaba deliciosa! Incluso, al llamar al centro, pregunté si las fotos eran auténticas.
Bien, al llegar, lo único que no me gustó demasiado es que te hacían esperar quizás un poco más de la cuente. Pero valió la pena. Se abrió la puerta y apareció Paloma, bajita, delgada, con un cuerpo precioso y una cara bellísima. Bien! Pensé.
Volvió a salir (un poco más de espera) y mientras me fui desvistiendo. Cuando llegó, me invitó a la ducha. Allí volvió a salir, pero cuando volvió se quitó su vestidito negro (el de la foto) y se metió en la ducha conmigo, Cogió una especie de esponja y me fue lavando. También usaba las manos, y finalmente, su cuerpo. Yo ya tenía mi miembro con ganas de fiesta.
Después de estos prolegómenos, nos dirigimos a la habitación donde se hallaba el tatami. Aquí me estiré boca abajo y ella vertió el aceite sobre mi espalda. Me hizo un masaje bastante fuerte y larguito. Después, también en mi zona anal y escroto.
Al cabo de un buen rato, me dijo que me pusiera boca arriba. Uuuffff, cómo estaba! Deslizó su cuerpo cubierto de aceite contra el mío, y jugueteó com mi pene, en la zona glanderiana, Cuando le advertía que me estaba a punto de correr, apretaba el tronco de mi falo para impedirlo.*
Hasta que llegó el momento esperado del cunilingus. Colocó su vulva encima de mi boca y se la comí àvidamente. Làstima que duró poco el evento, ya que muy pronto empezó a cabalgarme hasta que me corrí en su interior.*
Creo que repetiré, aunque sin aceites (me causan alergia en la piel de mis partes).
*





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