El otro día en Madrid sufrí Cesar, ese mismo ataque despiadado que tu cuentas, de una chica que domina muchas artes con esmero, y me recordó ...........
A veces uno maquina y maquina y .........
El otro día en Madrid sufrí Cesar, ese mismo ataque despiadado que tu cuentas, de una chica que domina muchas artes con esmero, y me recordó ...........
A veces uno maquina y maquina y .........