¡Felicidades, Campeón! Comprendo perfectamente que quisieras probar con Barbie. Su físico es una tentación demasiado grande para los que sentimos debilidad por las rubias brasileiras. Pocas oportunidades hay en la vida de trajinarse a semejante pivón. Antes de que nos vuelva a dejar por un tiempo me gustaría repetir. Guardo muy buen recuerdo.