Está muy claro, es como en la película de Cleopatra en Egipto, en que había un "peazo" de negro con un abanico en la habitación, y que si tu no cumplias de forma satisfactoria, con la doncella en cuestión, y no la hacías gozar, "EL" personalmente, te daba "tu merecido".
Ya me dirás el premio que he ganado.
Un saludo.