El recuerdo de mi experiencia con Laura sigue latente en mi cerebro y también en mi corazón.
Ocurrió hace aproximadamente un año, en las sobrias habitaciones de Rambla Catalunya / Provenza.
Nuestra cita fue a ciegas y por tanto no sabía si ella sería una madura guapa, muy guapa o simplemente normal (lo que ocurre normalmente...).
Se presentó con gafas de sol que escondían unos preciosos ojos marrones. La primera impresión fue muy buena, para que engañarnos fue brutal. El corazón sufrió un vuelco.
Es una madura cuidada, elegante, simpática, inteligente y una mujer muy especial.
Nuestro encuentro sexual fue magnífico, ella es una mujer muy conservada, delgadita, preciosa de cara.
Vestía ropa erótica, perfecta para la ocasión, además utiliza un "gel retartador" de la eyaculación, para que así los chicos que nos vamos rápidos tardemos un poquito más.
La experiencia dejo huella. Sigo pensando en volver a quedar con Laura. Pero ella selecciona sus "amigos", no suele repetir con clientes (salvo excepciones) y mis continuos y reiterados envíos de mensajes para volver a quedar con ella se han quedado en intentos banos.
Su tarifa es elevada (200 euros) pero creo que si cobrara 250-300 euros, seguiría teniendo el mismo éxito.
Creo que mi experiencia con ella ha sido una de las mejores en mi vida con una escort.
Mi esperanza y mi ilusión es poder volver a quedar con ella. Ganas no me faltan, ahora todo depende de ella.