No puedo juzgar el masaje, solo sé que fue agradable y que no me dolía ni me crujía nada después. (He oído que en masajes mal hechos puede ocurrir).
La chica no se anuncia como masajista así que nada de recliminar, supongo que era una forma de empezar a tener contacto físico y entablar conversación más que nada, pero bien.
Lo de después si que fue espectacular!!!!
Para mi, si es un hándicap que no bese, me encanta besar, pero es que además la chica es preciosa para comérsela a besos.
Por supuesto Ana está a otro nivel, a Fernanda no la conozco, el precio también es otro. Y mientras Ana es una escort profesional, Estel rehuye de esa profesionalidad, consciente seguro de lo que quiere ofrecer y no decepcionar a nadie.
Yo salí contento y puedo asegurar que repetire. Por simpática, honesta y carácter creo que se merece la oportunidad de conocerla.