Iniciado por
oliba
Ya hace mucho tiempo que quería escribir sobre este tema.
Periódicamente surge este tema. Alguien habla de María e, inevitablemente, se inicia la misma discusión. Ni siquiera es necesaria una experiencia para opinar.
Yo no sé lo que os hizo María, pero sí lo que me hizo a mi, y os lo voy a contar.
Hace ya algunos años, tampoco tantos, María era la reina de un local, la Venus, en la Calle Valencia, por el centro. Compartía trono con otra chica, Ginna, la Italiana para algunos, Cubana para otros. Que más da. También ambas eran estrellas en un foro de la ciudad, en otro, que todavía existe, aunque muchos, muchísimos miembros están en el nuestro. Las experiencias se sucedían continuamente, la mayoría positivas, mejor dicho, muy positivas.
Con estas premisas, Oliba fue a la Venus y organizó una fantasía con María y Ginna (o Gina, o Ghina). Y Oliba disfrutó muchísimo. Y repitió, y repitió, y repitió... Unas veces sólo con María, otras con guión preestablecido con Ghina (o Ginna o Gina), otras con ésta última u / y otra/s... Me divertía en ese período y, creedme, no era nada fácil encontrar una chica implicada como ella. Nada, nada fácil. Después, como independiente la vi sólo una vez.
Sería muy tonto si afirmara que sus fotos no tienen mucho retoque. Es evidente. Y dramáticamente lógico, si tienes que competir, para poder trabajar, con modelos esculturales, con fotos además retocadas, como las que se anuncian en los portales de Barcelona. La publicidad es así. Y la necesidad de trabajar también. En este ambiente, hay mucho de engañoso. Hay photoshop, sí, hay decepciones, también. Y también hay chicas que se presentan como independientes y son realmente escorts de agencia, bien apoyadas y mejor promocionadas. Mucha competencia, mucha oferta, menos trabajo. Y ahora, ni te cuento. Y de aquí un año...prefiero ni pensar en ello.
Pero su implicación está muy por encima de la media. Si buscáis una escultura que respira (y no siempre estoy seguro que lo hagan realmente algunas) entonces evitad a María, si queréis una mujer entregada y enormemente sexual, es una muy buena opción.
Yo no sabría describiros exactamente como es. Una chica normal, bajita, con curvas, pechos grandes, trasero interesante, muy simpática. De cara también normal. Ni es una belleza despampanante ni una chica fea, Cuando estoy a gusto, y con María estuve siempre muy a gusto, olvido o quizás obvio la cuestión física. Porque no sólo miro, también toco, acaricio, lamo, aspiro aromas, beso, en ocasiones me dejo acariciar los sentidos por una voz dulce y cálida. En una palabra: disfruto. Todo cuerpo pasa, todo rostro se difumina, toda imagen visual se desvanece. Sólo el buen recuerdo perdura.