SAludos:
Esta semana estuve alli por primera vez, dada la imposibilidad de escaquearme a Bcn por motivos profesionales, y decidí darme un pequeño homenaje...
Despues de dos llamadas, localizo el inmueble en cuestión. La encargada me informa que solo dispone de tres Srtas., ya que las demás estaban de fiesta para acicalarse en la peluquería y demás. Como ya había planificado el mediodía, decido que me quedaré a ver al personal disponible (con una, basta...). Me acompañan a la sala de espera (mejor que detras de una cortina, como en otras partes), y entra primero Angela, y despues de oir voces y de esperar cuatro minutos, se ofrece Tatiana. Colombiana de piel oscura, con una sonrisa radiante. Elijo a esta última, aunque solo para un servicio de media hora. 60€, ya que tampoco es para mi, el tipo de escort que a un servidor agrada. Después de la preceptiva ducha, e instalados en la cama, me empieza a contar que acababa de pelearse con la encargada, que los gritos que oía eran porque la encargada le pidió que entrase a ofrecerme sus servicios, cuando ella ya había pedido la cuenta, y que estaba esperando que la pagasen para marcharse del local. Total, un verdadero fracaso. A la salida, estuve dudando sobre el que diría a la encargada cuando me preguntase, y, sorpresa, no encontramos a nadie en mi marcha del chalet, por lo que fue Tatiana quien me acompañó a la puerta y me despidió...
Todos tenemos algún maldía en el trabajo. LA srta. quizás no fué lo suficientemente profesional como para no involucrarme en sus problemas personales, pero entiendo que la primera persona que no hace bién su labor, es la encargada que permite que una empleada insatisfecha, atienda aun cliente que le mencionó en su primera frase que había sido cliente de ALina, pero que desde hacía bastante tiempo, y después de varios desengaños, no volvería a poner los pies por allí.
Habrá que mejorar la productividad de uno mismo, para sacar más tiempo libre para hacer alguna excursión a la capital, porque aqui estamos gafados...
Saludos de nuevo.