Pues este mismo sábado vuelo a Madrid desde lejanas tierras. Probablemente no duraré mucho en el suelo patrio, pero lo mismo un día me cojo el jet privado y me planto en Barcelona para invitaros a una merendola de las que hacen época y pegarle fuego a lo que haga falta, si es que el alcalde no nos envía a los mozos.
Pero, os aviso de antemano: al primero que intente remojarme lo inhabilito por una larga temporada para seguir conociendo escorts, ¿eh?