Lucía, mi Nkita siberiana de L´HospiKistan
| Total | Fecha | Ciudad | Belleza | Servicio | Media | Usuario |
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|---|---|---|---|---|---|---|---|
| 01/2012 | Barcelona |
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OneManBand |
1.594 veces |
| Apartamento por horas | 8 |
| Duración | 93 minutos |
| Precio | 150€ |
| Pecho | No lo sé |
| Fumadora | No lo sé |
| Besos | Besa con lengua |
| Francés | Sin |
| Griego | No |
Nikita I need you so
Oh Nikita is the other side of any given line in time
Counting ten tin soldiers in a row
Oh no, Nikita you'll never know
Do you ever dream of me
Do you ever see the letters that I write
When you look up through the wire
Nikita do you count the stars at night
Su nombre de guerra es Lucía, pero yo la llamo Nikita porque siempre nos amamos a los sones de la canción de mi primo Elton, “Nikita está al otro lado de la línea del tiempo, contando diez soldados de plomo en fila,….......Nikita, tú cuentas las estrellas por la noche?”
Nikita es de los Urales pero a mi siempre me visita vestida de siberiana y se desnuda como la mejor sambista de Ipanema a los sones de la lambada: “dançando lambada eh, dançando lambadá” Hasta que se queda con su tanguita negro que a mí me gusta que mantenga para arrancáselo con los dientes al final de la escapada. Pamorise!
Una de estas tardes en que uno entretiene el alma pero castiga el cuerpo con los mensajitos inocentes pero certeros de una de estas nuevas niñas-escorts de madrí, al final pierde los papeles, se hace una trampa al solitario y le sale una dama de corazones, o sea que le toca amar en tiempos revueltos y pegarle otro empujón a la VISA hacia el despeñadero de tus penurias económicas, mintiéndole a tu AFP con la excusa de un nuevo dolor de muelas.
Llamadita a tu gachisse de cabecera, Nikita, y cita a las seis en los apartamentos de Breda3, donde me reservan la chambre presidencial para 93 minutos de amor y retoce siberiano en los tiempos de sequía.
Botellita de Brut Zero que nos suben bien fría cuando Nikita llega y luego juntos andamos el mejor de los caminos por esos senderos sin retorno en que uno pierde la vergüenza, confiesa su miserias y eleva el ánimo entre las piernas gozosas de una jaca siberiana de L'HospiKistan, antigua USSR o Baix Llobre,que cantaban los Beatles.
Pero al final el Brut Zero de mis ánimos y mis fuerzas se acaban, los mintuos se consumen y "hay que regersar......
a la maldición del taxi sin Nikita,
a la perdición de tu cuarto de estar
a la mirada reprobadora de la chacha
y a las cenicientas rubia dle foros Xtar"