Barcelona
Apartamento de la escort | 9 |
Duración | 90 minutos |
Precio | 150€ |
Pecho | Tuneado |
Fumadora | No lo sé |
Besos | Besa con lengua |
Francés | Sin |
Griego | No |
Hacía ya bastante tiempo que andaba detrás de Cindy Mumm, pero debido a mi mermada economía los encuentros en estos momentos los realizo bien espaciados en el tiempo y con la intención de no volver a pinchar hueso después de unos cuantos fiascos seguidos… Si es que hay ser más amarrategui y no se puede ser tan emprendedor.
Llamé a Cindy Mumm para mantener el primer contacto vía telefónica. No hubo una conexión especial pero me dejo el presentimiento de que era podía ser muy dulce, sensación que apoyaba en las experiencias que de ella había leído en otros foros.
Llegué a su piso, me abre la puerta, la veo y por poco me caigo. Es la de las fotos!!! Y es la primera vez en la que creo que la realidad supera las fotografías del anuncio. De cara es sencillamente preciosa, y me recibe con unas picardías de lencería que me permiten ver prácticamente su cuerpo entero. Sigo mirándola, hago que se dé la vuelta, la miro y la remiro a la par que le comento que no sólo me parece preciosa sinó que además es muchísimo más atractiva al natural que en las fotos. Mis piropos le hacen esbozar unas sonrisas a medio camino entre los nervios y el sonrojo, pero ella para nada estaba nerviosa, acaso se sentía halagada y quizá no se acababa de encontrar del todo cómoda en ese estado.
Me ofreció un refrigerio que agradecí. Su apartamento es confortable, genialmente iluminado y resulta una atmósfera ideal para un encuentro con semejante perla. Tiene pensado hasta el último detalle con el fin de que su invitado se sienta bien, a los pies de la cama un galán sirve de descanso para la ropa, convenientemente equipado con unas zapatillas desechables. Me preguntó si quería ducharme cosa que agradecí pues por motivos obvios estaba muy acalorado. Controla tanto esos pequeños flecos que diferencian lo bello de lo sublime que hasta dispone de un variado surtido de desodorantes masculinos.
Un pequeño incidente con la ducha generado por la torpeza de mis manos, que veces necesitan calcetines, generó complicidad en la conversación que estábamos manteniendo. Ya de vuelta a la habitación la temperatura ambiente fue creciendo y es que Cindy echó todo el carbón en la caldera, empezó a comportarse como una auténtica novia. Tiene los pechos tuneados, pero viva el artesano que se los moldeó. Para mí indiscutiblemente los mejores pechos tuneados a los que me he enfrentado y eso que yo soy más bien reticente a esta cirugía. Sus labios saben a miel y besa tiernísimamente. Es que Cindy, de hecho, despierta la ternura. Hice con ella muchas menos “marranadas” que en otras ocasiones con otras escorts, pero me todo lo que hicimos rozó la excelencia. No es la mejor felatriz, pero ya hubiese querido yo que alguna de las novias que he tenido lo hicieran así. En el apareamiento gana muchísimos enteros. No voy a entrar en detalles de relato erótico porque me pareció todo tan tierno que prefiero dejarlo entre ella y yo… y simplemente… os invitaría a conocerla.
Es menudita y manejable, armoniosamente proporcionada y para los que se fijen, como en mi caso, con unos pies preciosos (que mira que cuestaaaa) cuidadísimos, y unas manas asimismo bonitas que te invitan a cogerles y apretarlas contra ti.
Fueron dos rounds (cuando yo suelo ser de un solo tiro), cargados de complicidad, suavidad, tacto, humor, pues tuvimos momentos de carcajadas. Tiene una conversación interesante, es una chica con sus propias ideas claras y la cabeza bien amueblada. Nos pasamos del tiempo una auténtica barbaridad y en ningún momento miró el reloj, de hecho fui yo que finalmente por vergüenza le dije que debía irme.
Ha sido indudablemente mi mejor experiencia con una escort. Tanto es así, que va a ser la primera vez que repetiré, cosa que hasta la fecha no he hecho, no porque no haya tenido experiencias que no mereciesen una segunda vuelta sinó porque prefería seguir pescando en el océano. Pero Cindy, para mí ha rayado la perfección, y creo que futuros encuentros venideros pueden ser incluso si cabe un poquito mejores porque el primer hielo ya ha sido picado.
Altamente recomendada para quien quiera pasar un buen rato con un trato de amiga con derecho a roce, pues tampoco es bien bien una GFE, y contraindicado para el que se quiera sentir una estrella del porno y practicar sexo duro. Cindy Mumm es una muñeca que pide y da dulzura.
Gracias Cindy y no cambies…