Carol Vega, cuerpo de modelo.

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Barcelona

Local Agencia o Club	10
Duración	60 minutos
Precio	150€
Pecho	Natural
Fumadora	No
Besos	No besa
Francés	Sin
Griego	No

La experiencia con Carol Vega es muy distinta a todas las que he tenido el gusto de compartir con vosotros hasta la fecha. Todo comenzó cuando un amigo me comentó que había descubierto que una actriz porno que le ponía muy burraco se anunciaba como masajista. La curiosidad fue superior a mí, y tras poner su nombre en el más famoso buscador del mundo mundial, y deleitarme con sus vídeos y sus fotos no me resistí a la tentación de llamar al teléfono de su anuncio en los últimos días del pasado año. Me atendió una mujer (no Carol) que me informó muy amablemente sobre el tipo de servicio. Decidí lanzarme a probar y lo siguiente es lo que sucedió.

Carol recibe personalmente en un precioso espacio, similar a un loft de madera, al que se accede por una portería convencional de una calle del Poble Sec situada en una calle que está detrás del Molino, a escasos 5 minutos caminando de la parada de metro de Paral·lel. Cuando se entra en el piso hay que bajar unas escaleras y se llega a un espacio cálido y aislado del mundo que reune todas las condiciones idóneas para desconectar de todo y centrarse sólo en disfrutar. Es sin duda de los sitios más bonitos que me he encontrado en mi experiencia escortil.

Respecto al físico de Carol decir que es una chica joven y con un cuerpo de modelo. Es alta, delgada, esbelta, con una cintura de avispa y un cuerpo en forma de guitarra. Su abdómen es de lo mejor (o el mejor directamente) que he visto. Su culo también es de matrícula de honor. Los pechos son pequeños pero coronados por unos pezones deliciosos. Y de cara tiene un cierto parecido con la actriz de quien toma prestado su apellido artístico. Quizás por esa juventud su actitud es un tanto tímida pero muy respetuosa.

La sesión en sí consistió en una ducha conjunta (ella te limpia las partes nobles) para posteriormente pasar a un masaje. Comienza centrándose en tu espalda que unta de aceite y masajea muy bien. Yo esperaba un body body que no llegó. Al cabo de un rato me pidió que me girara y comenzó con una masturbación muy suave y rica que alternó con una mamada también muy delicada. Todo era a un ritmo muy lento intentanto prolongar el placer al estilo tántrico al que se refiere en el anuncio. Cuando ya llevábamos un buen rato así, le pedí que se estirara ella y pasé yo a la acción. Me dediqué a recorrer todo su cuerpo por delante y por detrás (me explayé acariciando su culo que se merece un monumento) y cuando vi que el tiempo se agotaba le pedí darle al folleteo porqué ya estaba salidisimo. Accedió y lo hicimos al estilo misionero. Aquello estaba tan rico que me fui en escasos 5 minutos en un orgasmo de esos que te deja como nuevo. Luego duchita por separado para quitarme el aceite del masaje del cuerpo y para casa.

La verdad es que su actitud fue un poco fría, quizás por la timidez o porqué no acabó de conectar conmigo, y eso me impidió disfrutar plenamente, pero en todo caso, disfrutar de ese cuerpazo mereció la pena. Quizás repita para ver si una vez que me ha conocido mejora ese aspecto y la experiencia es aún más satisfactoria.